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La OMS no quiere hablar del contagio de covid por aerosoles, pero insiste en la importancia de ventilar

  • Desde hace unos días, la OMS insiste en la importancia de ventilar bien los interiores para prevenir el contagio de covid-19

  • Los CDC estadounidenses ya admiten, en su página web, que la inhalación de aerosoles "es la forma principal de propagación del virus" SARS-CoV-2

  • Gran parte de la comunidad científica lleva meses pidiendo a ambos organismos que acepten las "evidencias abrumadoras" sobre la importancia de esta vía de contagio

El tema es polémico. Porque admitir que los aerosoles son "la forma principal de propagación del virus" supone admitir que "en interiores no hay distancia segura", como advertía en NIUS el experto de la Universidad de Colorado José Luis Jiménez, uno de los científicos que más ha batallado para que la OMS y los CDC admitan el importante papel que están teniendo los aerosoles en la rápida propagación de la covid-19.

Admitirlo supondría que las medidas que se han estado tomando hasta ahora, en interiores, pueden no ser suficientes. Los dos metros de distancia de seguridad entre las personas se quedan cortos, en interiores, para unos aerosoles que ya se ha comprobado que quedan en suspensión en el aire durante varias horas.

Las gotas más grandes, las que se expulsan al toser o al estornudar, caen enseguida por su propio peso. Para ellas sí parece que valdrían los dos metros de distancia. Los aerosoles, en cambio, son mucho más pequeños. Son esas pequeñas partículas invisibles que exhalamos al hablar, al cantar, al reírnos, o simplemente al respirar.

Pero de momento, la OMS sigue sin reconocer explícitamente esa "abrumadora evidencia científica" de la que alertan muchos científicos sobre la transmisión de la covid-19 por aerosoles. Algo que le piden ya, incluso, a través de la plataforma Change.org. Hace unos días, se ha lanzado una petición en la que "ciudadanos del mundo", agrupados bajo la plataforma "Covid is airborne", urgen al organismo a dar recomendaciones claras y concisas al respecto que permitan protegerse a la población.

La OMS insiste, ahora, en ventilar los espacios cerrados

De momento, en su web, cuando informan de los modos de transmisión del coronavirus, leemos que "los datos actuales sugieren que el virus se propaga principalmente por medio de gotículas respiratorias entre personas que estén en contacto cercano". El contacto cercano es clave para la OMS. Los aerosoles implican lo contrario, que puedes infectarte aún estando a varios metros de la persona con covid con la que compartes espacio.

Pero sobre los aerosoles, siguen afirmando que son importantes, pero en determinadas circunstancias (médicas). "Se están realizando más estudios para comprender mejor las condiciones en las que se produce la transmisión por aerosoles fuera de los centros médicos en los que se realizan procedimientos médicos específicos, llamados procedimientos generadores de aerosoles".

Fuera de esos entornos médicos, la consideran "posible", pero no la vía principal de transmisión, ni mucho menos. "La transmisión por aerosoles puede producirse en entornos específicos, sobre todo en espacios interiores, abarrotados y mal ventilados en los que personas infectadas pasan mucho tiempo con otras, por ejemplo restaurantes, prácticas de coro, clases de gimnasia, clubes nocturnos, oficinas y/o lugares de culto".

Hablan de "espacios interiores mal ventilados" porque la ventilación se ha revelado como un mecanismo clave para prevenir el contagio. Pero sólo tiene sentido si se refieren al contagio por aerosoles. Ventilar bien un espacio cerrado (que el aire que circula se renueve con frecuencia con aire del exterior) es la mejor forma de protegerse en interiores. Junto con las mascarillas, la higiene y la distancia, claro.

Y ahora, la OMS está haciendo mucho hincapié en ventilar, lo cual supondría una forma indirecta de admitir la importancia de esta vía de propagación. En los últimos días no hacen más que recomendar, una y otra vez, ventilar bien los interiores. Lo escuchábamos de boca de la propia María Neira, la Directora de Salud Pública de la OMS.

En el vídeo vemos que Neira hace referencia, incluso, a algo de lo que llevan meses advirtiendo los expertos en aerosoles. En los interiores donde ventilar no sea posible, se hace necesario el uso de medidores de CO2 (para controlar la calidad del aire) y de filtros HEPA (para mantenerlo renovado y libre de aerosoles que puedan ser infectivos).

Ante las reiteradas advertencias de la comunidad científica, ya son muchos los que los han implantado en oficinas y colegios. Y más ante la llegada del invierno y la dificultad de garantizar una buena ventilación natural durante los próximos meses. La Comunidad de Madrid, por ejemplo, acaba de anunciar que va a instalar medidores de CO2 en los centros educativos. A pesar de que, en España, Sanidad ha adoptado de momento la misma postura de la OMS, es decir, no reconoce los aerosoles como vía relevante de contagio pero sí insiste mucho en ventilar. Lo cual supone, indirectamente, asumir el importante papel que están jugando en la transmisión del virus.

Los CDC, a vueltas con los aerosoles

Quienes sí son algo más claros al respecto son los CDC estadounidenses (Centros para el Control y Prevención de Enfermedades), que, en su página web, ya incluyen la inhalación de aerosoles como "vía principal de propagación". Cuando informan sobre "¿Cómo se propaga el virus?", leemos: "Se propaga a través de gotitas respiratorias o pequeñas partículas, como las de los aerosoles, que se producen cuando una persona infectada tose, estornuda, canta, habla o respira. Estas partículas pueden inhalarse por la nariz, la boca, las vías respiratorias y los pulmones y causar una infección. Se cree que esta es la forma principal de propagación del virus".

Aunque esto queda matizado, porque enseguida hablan de "posibilidad" y de "creciente evidencia", en ningún caso rotunda ni "abrumadora". Aseguran que "es posible que el COVID-19 se propague a través de las gotitas y las partículas en el aire que se forman cuando una persona que tiene COVID-19 tose, estornuda, canta, habla o respira. Existe una creciente evidencia de que las gotas y las partículas en el aire pueden permanecer suspendidas en el aire y ser inhaladas por otros, y viajar distancias más allá de los 6 pies (por ejemplo, durante la práctica del coro, en restaurantes o en clases de gimnasia). En general, los ambientes interiores sin una buena ventilación aumentan este riesgo".

Hacen referencia al coro, al restaurante o a las clases de gimnasia porque son situaciones en las que ya se han registrado importantes eventos de supercontagio. Lo curioso es que, según los expertos, sólo se pueden explicar a través de la transmisión por aerosoles.

El tema de los aerosoles ha generado más de un quebradero de cabeza a los CDC. En septiembre, llegaron a colgar un documento en el que se admitía claramente la importancia de esta vía de contagio, pero a las 24 horas desapareció misteriosamente de su web. Después, el 5 de octubre, colgaban una nota informativa en la que admitían esta posibilidad de contagio a través del aire, pero sólo en determinadas circunstancias.

Esa nota llegaba justo después de que los principales expertos en la materia publicaran la carta en la revista Science en la que les pedían (a ellos y a la OMS) ser más claros en sus recomendaciones a la población sobre cómo protegerse de la covid-19. Es la carta en la que aseguran que hay "evidencias científicas abrumadoras" sobre el papel clave de esta vía de transmisión. Pero está claro que ni la OMS ni los CDC las consideran, todavía, "abrumadoras".