Cómo guardar correctamente los alimentos en la nevera


Los utensilios y los métodos de cocción empleados afectan a la vida útil de los alimentos
Organizar nuestra nevera de forma correcta hará que los productos se mantengan en perfecto estado durante más tiempo y que se evite el desperdicio de comida
Isabel Gómez (@aenima.fit) y Chloé Sucrée (@beingbiotiful) explican cómo guardar y preservar distintos tipos de alimentos
Es muy común que, al abrir y rebuscar en nuestra nevera, encontremos algún alimento pocho del que nos habíamos olvidado por completo. Si esto es algo que nos pasa con frecuencia, puede llegar a suponer un importante desperdicio alimentario y económico.
Para evitarlo, es imprescindible conocer los tiempos de conservación de nuestros alimentos y preparaciones, algunos métodos de organización de la nevera y trucos para alargar la vida útil de los alimentos.
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Isabel Gómez (@aenima.fit) y Chloé Sucrée (@beingbiotiful), expertas en alimentación saludable y en batch cooking, nos explican sus consejos.
Tiempos de conservación
Cada familia de alimentos tiene un tiempo de conservación distinto que, además, puede verse alterado en función de las técnicas de cocción que utilicemos.
Por ello, Isabel Gómez (@aenima.fit), instagrammer de cocina saludable y vida activa, nos lo explica a continuación.
Frutas y verduras
Las verduras cocidas o al vapor, durarán unos 2 o 3 días, “mientras que si las pasamos por la sartén o las asamos, aguantarán incluso 4 días”, explica Gómez.
En general, las frutas aguantan unos 3 días en perfecto estado en la nevera. La manzana es la que se conserva mejor incluso ya cortada si la almacenamos en un tupper bien cerrado. Durará unos 4 o 5 días.
Carnes y pescados
Los alimentos derivados de la proteína animal deben cocinarse por completo para que se conserven bien hasta 5 días.
Los huevos cocidos, por su parte, se conservarán hasta 7 días sin pelar. Si los pelamos, su tiempo de conservación se reduce hasta los 2 días.
Pasta, arroz y similares
La pasta cocida, arroz, patata o similares aguantan bien unos 4 días. Otros platos cocinados como los guisos y estofados “son muy agradecidos”, indica Isabel Gómez. Se mantendrán en buen estado un tiempo similar o incluso más y “están más ricos el día después de hacerlos”, añade. Asimismo, la comida preparada no debe guardarse caliente en la nevera: primero se debe templar fuera.
Organización en la nevera
Una vez ya conocemos cuánto van a durar nuestros alimentos y preparaciones culinarias, es muy importante tener bien organizada la nevera para optimizar todavía más su conservación.
Chloé Sucrée (@beingbiotiful) creadora del blog Being Biotiful y autora de dos libros de cocina y batch cooking, nos da algunos consejos a la hora de organizar nuestra nevera:
- Los lácteos deben estar arriba.
- En los estantes del medio las salsas y las preparaciones propias como hummus, pestos y cremas.
- En los cajones inferiores deben guardarse las verduras.
- La fruta es mejor tenerla fuera de la nevera, a excepción de aquella más delicada como los frutos rojos.
- En la puerta de la nevera se pueden almacenar otros condimentos como el tamari o la mostaza, zumos, mantequilla, chocolate y leches vegetales (si son compradas, si son caseras mejor en un estante).
- Los huevos pueden mantenerse tanto fuera como dentro de la nevera, pero si optamos por la segunda opción, mejor que no estén en la puerta para que mantengan una temperatura estable.
Cómo alargar la vida de los alimentos
Para alargar la vida de los alimentos, son muy importantes los utensilios que utilicemos: “los recipientes herméticos asegurarán una mejor conservación, aunque sean de plástico” dice Isabel Gómez. “Lo importante es que la comida no esté expuesta”, añade.
Además, si estos recipientes son transparentes nos ayudarán a visualizar de forma más simple lo que tenemos. Por otro lado, para preservar las verduras de hoja verde, la creadora de @beingbiotiful explica que: “cuando llego del mercado las limpio con agua, les quito el tallo y las guardo en la nevera envueltas en paños de tela de algodón humedecidos. Así, se pueden llegar a conservar hasta una semana y ya están listas para su consumo”.
Otro truco para, además de conservar bien los alimentos, evitar el desperdicio de comida es que “pongamos lo más nuevo detrás para consumir lo más antiguo primero”, aconseja Chloé Sucrée.
Si, no obstante, tenemos algún alimento a punto de ponerse malo, hay varias cosas que podemos hacer para que no termine desperdiciado, siguiendo las pautas de Sucrée:
- Cocinarlo y congelarlo.
- Añadir el alimento a las preparaciones que sí que vayamos a consumir.
- Hacer un pesto, que se puede hacer con cualquier hoja verde.
- Darle otra vida en forma de batido.