Hallan unas postales manuscritas entre los restos de un fusilado del franquismo enterrado en una fosa común

Las misivas fueron enviadas por Nieves Monzó, mujer de Francisco Sanz, fusilado por el régimen franquista
Se han identificado 90 cuerpos de los 148 enterrados en la fosa 127 del cementerio de Paterna
El régimen ejecutó a 2.338 represaliados en el conocido como “el paredón de España”
“El otro día me encontré al vecino. Me preguntó por ti y me dijo que hará todo lo que pueda”, así le cuenta Nieves Monzó a su marido, Francisco Sanz Herráez, lo que estaban haciendo para que saliera de la cárcel modelo de Valencia. Y le anima, “he hablado con el juez y me ha dicho que no me preocupe”.
Sin embargo, a pesar de todos los intentos, Francisco, zapatero de 40 años de Benimamet (Valencia), fue fusilado por el régimen franquista el 13 de julio de 1940. Esta y otras cuatro postales han sido encontradas por los arqueólogos que están realizando la exhumación de la fosa 127 del cementerio de Paterna. Francisco guardó estas misivas como un tesoro. Las tenía dentro de una bolsa de plástico, en el bolsillo interior de la chaqueta que llevaba puesta cuando fue ejecutado.
“Muchos besos de los niños”
En otra de las cartas, la mujer le manda “muchos besos de los niños”. Y es a esos niños que, si todavía viven, serán ancianos, a los que están buscando desde la Asociación de Víctimas del Franquismo de la Fosa 127. “Vamos a ir a la iglesia de Benimamet para ver si están allí registrados y hacerles llegar las cartas que su madre le escribió a su padre”, señala Juan José González, presidente de la asociación. El propio Juan José nos cuenta que “hay otra carta de un amigo, Antonio Pons, escrita con pluma y es más complicado descifrarla, pero vamos a llevarla a un grafólogo para que revele el contenido”. De esta forma, intentan recuperar parte de esta historia enterrada hace 79 años.
148 fusilados en la fosa 127
El pasado mes de junio, después de años de lucha, la asociación de familiares consiguió el permiso y los fondos para exhumar los 148 cadáveres enterrados en la fosa 127 del cementerio de Paterna. Después de 3 meses de trabajo, se han exhumado 108 cuerpos, de los que 90 ya han sido identificados por las pruebas de ADN. Para Juan José González “estamos haciendo justicia. Queremos recuperar dignamente los cuerpos y entregárselos a sus familias”, y añade que “luchamos también porque desaparezcan las fosas comunes que aún existen en España”.
Restos bien conservados 79 años después
Las víctimas de la fosa 127 fueron fusiladas los días 13, 24 y 27 de julio de 1940. Los cuerpos de los 66 primeros asesinados, entre los que se encontraba Francisco, fueron depositados en el fondo de la fosa, de 6 metros de profundidad. “Encima de los cuerpos tiraban un bloque de cal y echaban agua para que se disolviera. Esa cal creó una capa de unos 20 centímetros que ha dañado los primeros restos pero que ha permitido que se conserven en buen estado el resto”, explica Juan José González. Además de las cartas, los arqueólogos han hallado 79 años después, ropa, lápices y unas medallas que los sacerdotes entregaban a los reos cuando los bendecían minutos antes de ser fusilados.
2.338 fusilados enterrados en fosas en Paterna
Las 148 víctimas de la 127 son solo una pequeña parte de los 2.338 fusilados en la “tapia de Paterna”, conocida como el “paredón de España”. Los restos fueron enterrados en fosas comunes del cementerio de la misma localidad entre 1939 y 1956. En la actualidad, solo se han podido recuperar alrededor de 600 cuerpos, a pesar de que los familiares llevan años reclamando que se abran las fosas y se devuelva la dignidad a estas víctimas del régimen franquista.