La magia que John Frusciante aporta a Red Hot Chili Peppers en cuatro canciones

Frusciante es un guitarrista de primer orden dentro de la música rock. Lo suyo no es virtuosismo, sino estilo
Los fans de Red Hot Chilli Peppers han tenido un regalo anticipado de Navidad. Vuelve el guitarrista John Frusciante, así que ellos esperan que con él vuelva también la magia (en esa receta de sangre, azúcar y sexo) al grupo. Las idas y venidas de este músico creativo e inestable han marcado la relación de la banda con sus mayores éxitos.
Rara vez un actor 'secundario' ha resultado ser tan importante en el destino de una formación musical. El bajista Flea ejerce el liderazgo, el carisma es del cantante Anthony Kiedis. ¿Qué aporta entonces Frusciante que le haga tan importante?
El músico de Queens es un guitarrista de primer orden dentro de lo que llamamos en sentido amplio música rock. Dejemos aparte las listas que lo han destacado entre los amos de la guitarra del las últimas décadas, al fin y al cabo lo suyo no es virtuosismo, sino estilo. Basta escuchar algunos títulos para entenderlo.
1. Maestro de los arreglos
Frusciante no acostumbra a llenar todo de sonido, pero es sutil, sabe cómo aportar detalles y líneas melódicas que pueden terminar siendo lo más reconocible de una canción. Temas como Scar Tissue o By The Way son buenos ejemplos.
2. Más funky
Se nota que Frusciante ha escuchado a los grandes del groove y el funky y él ha aportado algún que otro 'riff' (frase rítmica y pegadiza) al mejor repertorio. En estos temas, su toma y daca con Flea es de lo mejor de la banda. Hay mucho donde elegir en este apartado. Las guitarras de Give It Away o Suck My Kiss serían ejemplos clásicos, pero Frusciante también domina la adaptación de las técnicas funky a sonidos más pop, como en Can't Stop.
3. Las raíces, siempre las raíces
Para que algo funcione siempre debe tener fundamento. Un guitarrista debe innovar, pero también tiene que demostrar que tiene asimilada esa sabiduría que va acumulándose generación tras generación. Frusciante la tiene. Un buen ejemplo es cómo convirtió la idea ruidosa que se inventó Kiedis en Funky Monks en un inicio de canción rompedor que podría haber firmado alguna leyenda del delta del Misisipí.
4. Reinventar a Hendrix
Jimmy Hendrix es una referencia fundamental y Frusciante ha dado vida y nuevo aire a muchas de las técnicas del sonido del genio de Seattle. Esas frases construidas sobre lo que los guitarristas llaman 'double stops' que están en la receta secreta de Little Wing o The Whind Cries Mary volvieron a nacer en los años noventa en Under The Bridge.
Habría más canciones donde rastrear la influencia de Hendrix: Dani California termina sonando a Purple Haze. También Soul to Squeeze echa raíces en este sonido clásico. Veamos si esta nueva etapa, la tercera de Frusciante en Red Hot, deja alguna nueva joya.