Muere a los 98 años el diseñador Pierre Cardin


Fue uno de los pioneros en lanzar el prêt-à-porter
El diseñador de moda Pierre Cardin ha fallecido este martes en el hospital Americano de Neuilly, a las afueras de París. Tenía 98 años. Era uno de los diseñadores de moda más veteranos y pese a su edad, seguía en activo.
Aunque nació en Italia (San Biagio di Callalta), fue en Francia donde alcanzó la fama mundial, siendo uno de los diseñadores que apoyó el prêt-à-porter.
Apostó por la moda en serie
Hombre de negocios, llegó a crear un emporio con su nombre, convencido de que había moda más allá de la alta costura. Participó con André Courrèges y Paco Rabanne en la renovación de la moda francesa en el periodo de posguerra.
Además creo unas señas de identidad propias con creaciones futuristas, estampados geométricos y prendas unisex. También innovó con las siluetas y con los largos de las faldas.
Pero su mayor revolución fue apostar por la moda prêt-à-porter, es decir diseños y patrones hechos en serie, con mayor o menor producción dependiendo de la demanda.
Por esta visión de la moda le llevó a ser expulsado de la Chambre Syndicale de París, tras presentar en 1959 su primera colección de prêt-à-porter. Aunque pronto le volvieron a admitir.
Fue además el primer diseñador que desde Francia exportó sus creaciones a Japón.
Un italiano en París
Cardin siempre tuvo clara su vocación y, sin dudarlo, emigró muy joven a París, donde crearía un imperio y desarrollaría una de las carreras más longevas y exitosas de la alta costura francesa.
Ambicioso y muy trabajador, despuntó al lado de otro grande como Christian Dior y, reinventando el concepto de la moda femenina, pronto creó sus primeras boutiques y, al lado de Paco Rabanne y André Courrèges, revolucionaría la industria de la moda de posguerra en el país galo con sus propuestas futuristas, su atrevimiento, su originalidad y su inmenso talento, que pronto le granjearon un enorme éxito.
Pionero al crear su propia marca y montar un imperio de la nada, Cardin no dudó en vender sus espectaculares diseños en los grandes almacenes de la época, "democratizando" la alta costura francesa y desarrollando un innato talento para los negocios, puesto que amasó una fortuna de varios cientos de millones de euros creando franquicias en diferentes países y poniendo todo tipo de prendas y complementos con su nombre al alcance de las masas.
En cuanto a su vida privada, el modisto mantuvo una relación de cuatro años con la actriz Jeanne Moureau, aunque finalmente decidió aceptar su homosexualidad y decidió ser consecuente con su opción sexual y vivir libremente el resto de su longeva vida.
Culto, sibarita y cosmopolita, el diseñador también fue un reputado hombre de cultura y académico de Bellas Artes en París.
Hoy, con su fallecimiento, el mundo de la moda llora amargamente y se viste de luto, porque con Pierre Cardin se va uno de los últimos revolucionarios y uno de los grandes creadores de la alta costura francesa.