Neil Young demanda a Donald Trump por usar sus canciones en campaña


El veterano rockero asegura que no quiere "que su música se use para una campaña divisiva y no estadounidense, de ignorancia y odio”.
La demanda de Young contra Trump llega un mes después de que los Rolling Stones le amenazaran con hacer lo mismo si seguía utilizando temas suyos
Primero fueron los Rolling Stones, ahora Neil Young. Cada vez son más los músicos estadounidenses hartos de que los políticos utilicen sus canciones en campaña. Menos todavía, si se trata de Donald Trump. Young acaba de demandar al equipo de campaña del presidente estadounidense porque "no puede permitir que su música se use para una campaña divisiva y no estadounidense, de ignorancia y odio”.
El músico ha presentado una demanda en que le acusa de infringir derechos de autor por tocar sin autorización sus canciones. Se refiere, concretamente, a la utilización en mítines de Trump de algunos de sus temas más conocidos, como “Rockin’ in the Free World” o “Devil’s Sidewalk”, incluido uno realizado el 20 de junio en Tulsa, Oklahoma. Young también rechaza que el mandatario utilizara su música mientras visitaba el Monte Rushmore el 3 de julio.
“Esta demanda no tiene la intención de faltar al respeto a los derechos y opiniones de los ciudadanos estadounidenses, que son libres de apoyar al candidato que elijan”, explican los abogados de Young en la demanda. La campaña de Trump no ha respondido de momento.
No sólo Neil Young está harto
Hace un mes, fueron los Rolling Stones quienes amenazaron con demandar a Donald Trump si volvía a utilizar la canción “You Can’t Always Get What You Want” en su campaña. Pero lo de Young viene de lejos. El veterano rockero se viene quejando por el uso que hace Trump de sus canciones desde 2015, aunque dice que hasta ahora ha sido “ignorado”.
Nacido en Canadá y también ciudadano estadounidense, Young, de 74 años, es uno de los músicos más conocidos y respetados dentro y fuera de su país. Fue incluido en el Salón de la Fama del Rock and Roll como solista en 1995, y como parte del grupo Buffalo Springfield en 1997.
Pero no es el único nombre del panorama musical estadounidense que ha decidido decir 'basta'. A finales de julio, más de 50 músicos estadounidenses firmaron una carta abierta exigiendo que no se utilicen sus canciones en las campañas de los políticos si no hay un consentimiento expreso.
Piden una normativa clara para zanjar un tema que se repite cada vez que hay elecciones. Entre los firmantes aparecen Aerosmith, B-52, Alanis Morissette, Blondie, Regina Spektor, Cyndi Lauper, Elvis Costello, Lionel Ritchie, Green Day y los Rolling Stones.