El Stade de France borró las grabaciones de seguridad de la final de la Champions, un "fracaso" según la policía de París

Al no realizar un requerimiento judicial para conservar las grabaciones CCTV, las imágenes se borraron tras 7 días, como marca la ley
La policía de París lamenta el uso de gases lacrimógenos contra personas "de buena fe, especialmente familias"
El dispositivo de seguridad de la final fue "un fracaso a todas luces", reconoce en el Senado el Prefecto de la Policía de París
Un "fracaso". Así define el prefecto de la Policía de París, Didier Lallement, la gestión de las celebraciones de la final de la Liga de Campeones, entre el Real Madrid y el Liverpool que se celebró el 28 de mayo en el Stade de France parisino, en Saint Denis. Los instantes previos y posteriores al encuentro estuvieron marcados por el caos en las inmediaciones del estadio, donde las fuerzas de seguridad utilizaron gases lacrimógenos.
"Fue a todas luces un fracaso", ha admitido Llalement en una comparecencia en el Senado francés, que se ha disculpado con los seguidores españoles y británicos que se desplazaron a la capital gala por los momentos de inestabilidad vividos especialmente antes del inicio del partido.
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Gases lacrimógenos
Así, ha lamentado que hubiese personas "empujadas y agredidas" y que la imagen de Francia se haya visto dañada, pero también ha querido, si bien también ha defendido algunas de las prácticas más polémicas como el uso de gas lacrimógenos.
El jefe policial ha expresado su pesar porque estos gases afectasen a personas "de buena fe, especialmente familias", pero al mismo tiempo ha asegurado que era la única forma de reducir la presión sobre los accesos al Estadio de Francia, sede del partido. Ha dicho que parecía "la única forma" de hacer retroceder a la multitud sin una carga directa.
También ha querido destacar que la labor de la Policía evitó "una tragedia" y el hecho de que finalmente se pudiese jugar el partido sin que hubiese daños personales graves en las inmediaciones. El prefecto ha respaldado las cifras de Interior y ha reiterado que podía haber en esta zona entre 30.000 y 40.000 personas.
Grabaciones CCTV eliminadas
Pero, el desastre no quedó ahí. Porque en la misma sesión del Senado ha participado el director de relaciones institucionales e internacionales de la Federación Francesa de Fútbol, Erwan Le Prévost. El directivo ha reconocido que las investigaciones de los incidentes están claramente limitadas porque las imágenes grabadas por las cámaras de seguridad del Stade de France sólo están disponibles durante una semana, antes de ser borradas. La justicia no hizo un requerimiento para impedir la destrucción automática prevista por la ley. "Las imágenes ya no existen".
Se trataba de imágenes "extremadamente violentas", según Le Prévost, quien ha explicado que "las imágenes están disponibles durante siete días. Luego se destruyen automáticamente. Deberíamos haber tenido un pedido para proporcionarlas a las diferentes poblaciones. Las imágenes son extremadamente violentas".
Los senadores que han escuchado estas comparecencias no daban crédito a la negligencia cometida. La misma sorpresa ha mostrado el alcalde de Liverpool, también invitado a declarar. Steve Roterham fue uno de los afectados por el caos de seguridad, él mismo víctima de carteristas la noche del partido. Ante los senadores ha declarado estar "conmocionado" por esta información: "Es realmente preocupante, no entiendo Es fundamental recopilar todas las pruebas para la investigación, si estas imágenes fueran trituradas, mostraría muy claramente que hay un problema real".