Carlos Alcaraz, en semifinales del US Open tras ganar a Jannik Sinner en un partido épico

Carlos Alcaraz no tiene límites. Al menos no se conocen. El murciano ha vuelto a demostrar que es incansable dentro de la pista, que no da un punto por perdido y que su cabeza está más fuerte que nunca. Todo eso y un tenis increíble han permitido al pupilo de Juan Carlos Ferrero imponerse en un partido épico al italiano Jannik Sinner (3-6, 7-6, 7-6, 5-7, 3-6).

Hasta la madrugada ha tenido que prolongar el partido el español para deshacerse de su rival en cinco sets. Empezó ganando el primer set Alcaraz (3-6) sin demasiados problemas pero el tenis de Sinner fue calentando y salió a relucir en la segunda manga. Ahí comenzó el recital de tenis de ambos jugadores que ha hecho vibrar las gradas de la Arthur Ashe en múltiples ocasiones. Los americanos saben que Alcaraz es garantía de espectáculo y su sitio y su hora ha sido en todo el torneo la del prime time. Y no ha defraudado protagonizando esta noche uno de los puntos más increíbles de estas semanas.

No ha sido el único. Pero no han sido suficientes. El tie break se decantó del lado de Sinner en el segundo y el tercer set. La cuarta manga empezó mal para el murciano que cedió su saque nada más comenzar. Una rotura de servicio que parecía que no iba a poder remontar y cuando todo parecía perdido, de nuevo Alcaraz sacó su raza y le dio la vuelta al set para anotárselo (5-7) y llevar el partido a la quinta y definitiva manga.

Empezó seguro el español su camino hacia las semifinales pero un break de Sinner en el quinto juego le ha puesto contra las cuerdas. Ha durado poco el miedo porque Alcaraz le ha devuelto la rotura en el siguiente juego. Ninguno estaba dispuesto a tirar la toalla tras más cinco horas de dura batalla en la pista. Alcaraz se ha mantenido firme en su juego y ha acabado con las aspiraciones de Sinner con un saque directo. Punto y final a cinco horas y dieciocho minutos de partido que han puesto en pie a la Arthur Ashe durante minutos.

El italiano, que se había impuesto a Alcaraz en sus dos últimos cruces en Wimbledon y en Umag, ha dejado de ser la bestia negra del murciano que sigue su camino hacia su primer título de Grand Slam y quién sabe si a encaramarse al número uno mundial con tan solo 19 años. En el camino le espera el estadounidense, Frances Tiafoe, que dejó fuera del torneo a Nadal, y un Casper Rudd que, por el otro lado del cuadro, aspira también al primer puesto de la ATP si llega a la final de Nueva York.