Aficionados del Manchester United irrumpen en Old Trafford y obligan a suspender el partido contra el Liverpool

Miles de seguidores de los 'red devils' se habían dado cita frente al estadio para mostrar su descontento con los propietarios, sobre todo tras el visto bueno de estos al proyecto frustrado de la Superliga europea
Algunos de ellos lograron burlar la seguridad y entrar hasta terreno de juego e incluso lanzaron bengalas al palco
El partido, que debía arrancar a las 17:30 hora española, ha tenido que ser suspendido tras la invasión del estadio y el terreno de juego
Varios aficionados del Manchester United han burlado la seguridad de Old Trafford y han entrado este domingo en el estadio, algo prohibido para el público por la pandemia de coronavirus, para protestar por las actuaciones de los propietarios del club, la familia Glazer.
Miles de seguidores de los 'red devils' se dieron cita en los aledaños del estadio, que este domingo debía el duelo de Premier ante el Liverpool, para mostrar su descontento con los Glazer, sobre todo tras el visto bueno de estos al proyecto frustrado de la Superliga europea.
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Algunos de ellos lograron derribar las vallas, superar a los guardias de seguridad y entrar en el recinto a través del Túnel de Múnich. Tras ello, saltaron al terreno de juego e incluso lanzaron bengalas al palco. Una victoria del Liverpool este domingo le daría el título de la Premier League a los vecinos del United, el Manchester City.
Partido suspendido
El partido, que debía arrancar a las 17:30 hora española, ha tenido que ser aplazado tras la invasión del estadio y el terreno de juego. Los antidisturbios de la Policía británica han conseguido despejar ya el campo y los aledaños más o menos a la hora que debía disputarse el partido, mientras los jugadores de ambos equipos aguardaban en sus hoteles de concentración a la espera de una decisión definitiva sobre cuándo se disputará el encuentro. Aunque en un principio la Premier ha intentado retrasarlo, finalmente el encuentro ha sido suspendido.
Otro grupo de aficionados del Manchester United había intentado bloquear además el hotel en el que se concentran los jugadores de su equipo para evitar que se subiesen al autobús.
Los aficionados podrán regresar a los estadios el próximo 17 de mayo, según anunció esta misma semana el primer ministro Boris Johnson, una medida que les permitiría presenciar la última jornada de la Premier League.