Las cuentas pendientes entre Nadal y Medvedev de cara a la final del Open de Australia
El tenista español y su rival ruso se han enfrentado cuatro veces
Nadal busca su Grand Slam número 21 y Medvedev confirmarse como alternativa al 'Big Three' del tenis
La final se disputa este domingo 30 de enero desde las 09:30 horas en España
Rafael Nadal se va a medir a Daniil Medvedev en la gran final del Open de Australia que se disputará este domingo 30 de enero desde las 09:30 horas en España.
El tenista español luchara por levantar su Grand Slam número 21, lo que supondría deshacer el empate a grandes que tiene con Novak Djokovic, que fue deportado de Australia tras una polémica judicial que ha llevado al mundo a centrar la atención en el torneo de tenis más importante de las antípodas.
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Pero Medvedev lleva tiempo trabajando para romper la hegemonía del conocido como Big Three del tenis (Federer, Nadal, Djokovic) y es un firme candidato a ello si consigue el primer grande del año, que precisamente perdió el año pasado en la final con Nole.
El tenista de Manacor, actual número 5 del mundo en el ranking de la ATP, y su oponente ruso (número 2 tras Djokovic) se van a ver las caras por quinta vez, y todas ellas han sido en pista rápida. Y de los cuatro enfrentamientos hasta ahora, tres han sido para Nadal y uno para Medvedev. Aunque el ruso fue el que se llevó su último duelo disputado en 2020.
Pero Rafa tiene mejores resultados contra Daniil en lo que a finales respecta. Porque ya le ganó el título en el Open de Estados Unidos de 2019 y el Máster 1000 de Canadá de ese mismo año.
La diferencia de edad entre ellos, Nadal tiene 35 años y Medvedev 25, puede marcar este nuevo enfrentamiento crucial. De hecho, el español no ocultó sus problemas físicos al principio del torneo. Pero otra de las claves puede ser la fortaleza mental, en la que Nadal es un maestro y de la que el ruso no puede ocultar que los nervios muchas veces le superan y juegan malas pasadas.
Los 89 títulos de Nadal frente a los 13 de Medvedev en sus respectivas carreras no cuentan para este partidazo que exigirá el máximo de los dos tenistas.