¡Que empiece el espectáculo!

No hay nada igual que el fútbol. No hay nada en la industria del espectáculo que tan siquiera se acerque. Por mucho que se empeñen en auto destruirlo con Súper-Ligas y guerras internas. Porque, al margen de factores como la emoción o el sentimiento, están esos guiones endiablados que parecen sacados del nuevo ‘blockbuster’ de MiTele.

‘Guardiola al Bernabéu’ sería la serie estrella de este invierno. Allí donde exclamó lo del “puto amo”, allí donde ganó 2-6, pero allí también donde con su Bayern se quedó en semifinales. No le llega en el mejor momento este enfrentamiento, pero falta mucho por llover en Mánchester antes de que los de Zidane aterricen allí para jugarse el pase a cuartos. Y con la Premier casi imposible, Pep hará ‘All In’ a la Orejona.

El sorteo ha deparado un doble duelo Liga - Premier justo ahora que parece que nos han adelantado por la derecha (bueno, en su caso sería por la izquierda). Porque del Zidane – Pep vamos al Simeone - Klopp. Otro choque de trenes en los banquillos. Dos equipos de autor en fases de cocción muy distintas. Mientras El Cholo anda horneando un bollo aún tierno, Jürgen lo tiene en el punto justo. El actual campeón es una máquina aún más engrasada que cuando levantó la Champions precisamente en el Metropolitano.

Otro serial con morbo será el Barça - Nápoles. O cómo Messi intentará profanar la cuna de Maradona. Allí donde Diego forjó la leyenda que le echan en cara a Leo, la de hacer el mejor a un equipo muy menor. Ahora con Gattuso en el banquillo, todo lo que sea llegar vivo al Camp Nou sería un éxito. Buen escaparate para Fabián.

Y en el doble duelo Liga - Scudetto el Valencia se ve, de pronto, con una opción muy real de estar entre los ocho mejores de Europa. Quién lo iba a decir cuando Marcelino salió por los aires de Mestalla. El Atalanta, un equipo vistoso y ofensivo, fácil no lo pondrá... pero ya lo hubiera firmado cualquier valencianista.

En todo caso, el sorteo de Champions de octavos de final es el gran ‘coitus interruptus’ del mundo del fútbol. Te pone la miel en los labios con unos emparejamientos de vértigo, pero te dice que te quedan dos eternos meses pasa disfrutar de este menú que les hemos ido desgranando. Vamos, como ir a cenar a un dos estrellas para que solo te dejen probar el pan. Por muy bueno que esté.