El Espanyol identifica y estudia la expulsión de los 12 aficionados que insultaron a Iñaki Williams
El castigo al que se enfrentan los individuos va desde la retirada del abono y carnet de socio hasta apartarles de cualquier actividad
Dos días después del encuentro disputado contra el Athletic Club, el RCD Espanyol ha identificado a los aficionados que lanzaron insultos racistas al delantero del conjunto rojiblanco Iñaki Williams. De la misma manera, como han informado en un comunicado, están estudiando su "expulsión de cualquier actividad que realice la entidad blanquiazul".
De acuerdo a las investigaciones del club perico, los individuos estaban situados en los sectores 107 y 108 del estadio, unas zonas que están fuera de la Grada de Animación. De las 12 personas, nueve son socios y tres adquieren entradas ocasionalmente.
El siguiente paso del club es mandar el informe del suceso al Comité de Disciplina Social, que será el encargado de tomar las medidas correspondientes y recogidas en el Reglamento de Disciplina Interno. Los castigos planteados van desde la suspensión de los carnets de abonados y socios hasta apartarles de por vida de cualquier actividad del Espanyol.
"La entidad ha trasladado su informe a los órganos policiales que elaboran las diligencias para que en su caso depuren las posibles responsabilidades penales. El RCD Espanyol de Barcelona reitera, una vez más, su enérgica condena ante cualquier muestra de carácter racista y violento", han finalizado.
La escena racista sucedió cuando el jugador salió del terreno de juego, por uno de los fondos, al ser sustituido. En ese momento, varias personas emitieron insultos racistas contra él. "Es algo que ningún jugador de raza negra o de cualquier raza quiere escuchar, está totalmente fuera de lugar", dijo en zona mixta.
Posible cierre de la grada
La Liga anunció el pasado domingo que pedirá el cierre parcial de la grada, desde la que se produjo la discriminación, al Comité de Competición de la Real Federación Española de Fútbol. También reflejaron que iniciarán acciones legales por un presunto delito de odio.