El paro subió en enero en 70.744 personas y la afiliación cayó en 215.000 trabajadores


El aumento del paro se concentró en el sector servicios y deja el número total de desempleados en los 2.908.397
En términos desestacionalizados, en enero se crearon más de 57.000 nuevos empleos, un aumento más intenso que el registrado en los últimos meses
El porcentaje de afiliados con contrato temporal retrocedió hasta el mínimo histórico del 15%, la mitad que antes de la reforma laboral
Tal y como marca el guion del mercado laboral, enero ha vuelto a ser un mes malo para el empleo. Como ocurre de forma sistemática, tras el fin de la campaña navideña el paro repunta y la afiliación cae. Las dos circunstancias se cumplieron el mes pasado.
El desempleo aumentó en 70.744 personas, lo que supone un incremento mucho mayor que el registrado hace un año, cuando el mercado de trabajo estaba aún en proceso de recuperación. En cambio, si se compara con los ejercicios anteriores, el enero de 2023 ha sido en el que menos ha subido el paro desde 2018.
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Algo similar sucedió con el empleo. El número de afiliados se redujo en 215.000 personas, una caída que es algo mayor que la del pasado enero, pero más reducida que la de los dos años anteriores y que se sitúa en la media de ese mes en la década anterior al estallido de la pandemia.
Con esta variación, el número total de afiliados medios se situó en los 20.081.224. Es la cifra más alta en la serie histórica para un mes de enero, y supone un incremento de 454.063 cotizantes en el último año.
Además, la Seguridad Social calcula que, eliminando los efectos del calendario, en enero se crearon 57.726 nuevos empleos en términos desestacionalizados, lo que supone el mayor aumento desde el pasado mes de mayo. Un ritmo de crecimiento de la afiliación que supera ampliamente la variación promedio de los últimos tres meses, que rozó los 20.000 nuevos cotizantes.
Aunque las cifras no apuntan, de momento, a una desaceleración del mercado laboral por la incertidumbre económica, como tampoco lo hacen los datos de trabajadores en ERTE (que permanecen estables por debajo de los 16.000), sí se aprecia una evolución negativa en las afiliaciones de los autónomos.
El pasado enero, el número de trabajadores por cuenta propia fue menor que el registrado un año antes (4.631 menos que en enero de 2022). Es el primer descenso interanual de estos cotizantes en que se produce en los dos últimos años.
El desempleo sube tras tres meses de descensos
El aumento del paro en enero se cebó en el sector servicios, que registró un incremento de 70.759 personas desempleadas (3,5%). También subió de forma más reducida en la Agricultura, en el colectivo sin empleo anterior (no lo hacía en un mes de enero desde 2014) y se mantuvo prácticamente estable en la industria. En cambio, se redujo hasta en 3.111 personas en la construcción.
El mes pasado, el desempleo aumentó más entre las mujeres que entre los hombres, a pesar de lo cual fue el enero con menos paro femenino desde 2009. Por territorios, subió en todas las comunidades, con excepción de Baleares y lo hizo con especial intensidad en Andalucía, Madrid y la Comunidad Valenciana.
El total de desempleados se situó el mes pasado en los 2.908.397, el menor en un enero desde 2008.
Reducción de la temporalidad
Los efectos de la reforma laboral, que ha cumplido un año y un mes en vigor, se siguen haciendo evidentes el aumento de la estabilidad en el empleo. En enero, el 44% de los 1,2 millones de contratos que se firmaron fueron indefinidos y se establecieron un millón de contratos temporales menos que en el mismo mes de 2019.
Con el aumento de la contratación de carácter estable, el porcentaje de afiliados con contrato temporal retrocedió hasta el mínimo histórico del 15% (la mitad que antes de la reforma). Un cambio de tendencia que se aprecia especialmente en los jóvenes ya que, entre los trabajadores menores de 30 años, el porcentaje de los que tienen contrato indefinido alcanza ahora el 77% frente al 47% de promedio de los últimos años.
Además, el Ministerio de Seguridad Social destaca que de los cuatro millones de afiliados que tuvieron un contrato temporal en el primer trimestre del pasado año y siguen dados de alta, más de la mitad (el 51%) cuentan ahora con un contrato indefinido. De ellos, solo el 20% (405.000) son fijos discontinuos.