El teletrabajo ha llegado para quedarse y puede cambiar la cultura presencial en la oficina

“Estamos mejor preparados para cambiar nuestros hábitos que suele ser a más largo plazo. Con todas las dificultades del mundo, el trabajo está saliendo adelante”, explican los expertos
Se dijo que era el mayor experimento de teletrabajo hasta la fecha. Fue muy al principio, cuando casi nadie pensaba que nos íbamos a pasar mes y medio encerrados en casa. Ahora que muchos trabajadores y empresas ya saben lo que es, ha llegado el momento de hacerle preguntas al experimento.
¿Ha llegado el teletrabajo para quedarse? "Absolutamente sí. Los trabajadores han aprendido que esto no es cielo y las empresas que no necesitan tanto presencialismo de los empleados. Todo han visto el grado de flexibilidad puede haber. Cuándo y cómo pueden desarrollar sus funciones desde casa”, defiende Nuria Chinchilla, profesora de Dirección de Personas en las Organizaciones del IESE. “Estamos mejor preparados para cambiar nuestros hábitos que suele ser a más largo plazo. Con todas las dificultades del mundo, el trabajo está saliendo adelante”.
Coincide con ella Mar Sabadell. “Sí, yo creo que habrá un cambio. Se ha visto que el teletrabajo funciona”. Esta experta en teletrabajo y profesora de Estudios de Economía y Empresa de la Universidad Oberta de Cataluña (UOC) recomienda que las empresas hagan “un análisis de las fortalezas y debilidades de esta experiencia. Algo que no se había hecho antes. Ahora nos hemos visto forzados a teletrabajar”.
España está más preparada ahora para el trabajo a distancia que hace un mes y puede ser un potencial de cara al futuro. Tres de cada diez empleados trabajaron desde casa la semana pasada, según una encuesta de la Fundación de las Cajas de Ahorros (Funcas). Esa cifra supone un notable aumento respecto a los datos oficiales del Instituto Nacional de Estadística: apenas el 4,5% del los españoles teletrabajan antes de que conociéramos al coronavirus.
“Hasta ahora había una reticencia cultural. Pero se ha visto que la actividad ha continuado. Nos encontramos en una situación extraña y puede volver a pasar, hay que aprovecharlo”, opina Sabadell.
“Muchas empresas han hecho un importante esfuerzo a nivel tecnológico estos días y esa implantación de aplicaciones y equipos las seguirán utilizando cuando finalice el estado de alarma”, expone Arancha de las Heras. La directora de la Universidad a Distancia de Madrid (UDIMA) coincide en que la organización de las empresas cambiará en el futuro. “Se quedarán las herramientas con las que hemos trabajado estos días: videoconferencias para evitarnos desplazamientos o aplicaciones de gestión de tareas, por ejemplo”, argumenta esta experta.
Estas tres expertas coinciden en que habrá otro cambio: la cultura presencial en la oficina que existe en nuestro país podría empezar a desdibujarse poco a poco. “Los responsables al menos se darán cuenta de que parte de la tareas también pueden realizarse desde el domicilio con un resultado mas o menos similar”. Una evolución que no será de la noche a la mañana. “Al principio todos desearemos volver a la oficina y reencontrarnos con nuestros compañeros, poner al día algunas tareas. En ese momento, lo oportuno será analizar el trabajo hecho y plantear un sistema de teletrabajo mixto, que es el que mejor funciona: el que combina días de trabajo en casa con días de trabajo en la oficina. Creo que ese modelo sí que se implantará en algunas empresas en las que solo existía hasta ahora el presencialismo”, detalla de las Heras.
Cuando la actividad vuelva a la normalidad y se evalúe el experimento habrá que tener en cuenta otro factor muy importante: el teletrabajo no se ha desarrollado en las mejores condiciones. La jornada laboral de muchos se complica estos días con los niños en casa y sus deberes del colegio.“La implantación del trabajo en el domicilio se ha realizado en condiciones extremas. Cuando se haga en condiciones normales, los niños estarán en el colegio durante la jornada de trabajo y la ansiedad o el estrés podrán ser motivados por múltiples factores pero no por uno tan extremo como el que nos está tocando vivir en estos momentos”, pronostica de las Heras.
Será entonces cuando levantarse, desayunar y empezar a trabajar sin atascos permitirá una mayor conciliación de la vida laboral y personal.