El mayor fabricante de bañadores de Nike o Reebok frena su producción en China

La crisis del coronavirus golpea con fuerza a las exportaciones de China
El 80% del negocio se exporta a Estados Unidos, la Unión Europea y Australia
Fuhua Clothing Factory era hasta ahora la mayor fábrica de bañadores del mundo, pero acaba de detener buena parte de su producción. Está situada en la ciudad industrial de Shenzhen, al sureste de china. La fábrica lleva abierta tres décadas y produce trajes de baño marcas como Speedo, Rebook o Nike. En peligro están unos dos mil empleos y es una muestra más de cómo ha empeorado la situación para los fabricantes y exportadores chinos tras la crisis del coronavirus.
David Lau, uno de los inversores clave de la fábrica Fuhua Clothing Factory, ha asegurado a un diario chino que “están negociando” con los trabajadores afectados por el cierre parcial. De momento, ha declinado dar detalles del número exacto de trabajadores afectados pero ha asegurado que "la pandemia de coronavirus ha causado problemas a la economía global, y ha afectado a los nuevos pedidos”.
Numerosos empleados han publicado vídeos en sus redes sociales, incluida la versión china de TickTok, para explicar que toda la fábrica podría cerrarse y 2.000 personas se quedarían en la calle. Los medios locales aseguran que la policía vigila los alrededores de la fábrica. Algunos empleados han explicado que la empresa les ha ofrecido el 70% de su salario como indemnización.
"Muchos trabajadores han aceptado la oferta y se han ido, pero otros la han rechazado y todavía siguen negociando”, asegura un trabajador.
Este cierre se produce cuando buena parte de la maquinaria exportadora China se ha frenado por el coronavirus, debido a una caída de la demanda global.
La producción en Shenzhen arrancó en mayo de 1990 para aprovechar apertura China. Su expansión fue rápida los años siguientes. El 80% del negocio se exporta a Estados Unidos, la Unión Europea y Australia. La empresa ha trabajado para marcas globales como Adidas o Nike y llegó a dar trabajo a 6.000 personas en pleno apogeo.
Pero 2020 ha golpeado con fuerzas las exportaciones de Shenzhen. En los cinco primero meses han caído más de 8% respecto a 12 meses antes. En toda China ese descenso ha sido de un 7,7% en el mismo periodo. El Gobierno se puesto como prioridad “estabilizar el comercio exterior”
El primer ministro chino Li Keqiang ha instado a todos los departamentos a "tomar medidas de apoyo para ayudar a las empresas que atraviesan dificultades".
“La pandemia todavía se está extendiendo y la economía global está en profunda recesión. China está profundamente integrada con la economía mundial, y la situación del comercio exterior seguirá siendo sombría”, ha asegurado Li.
Las autoridades en Shenzhen hicieron un esfuerzo hace dos meses para reanudar la producción, incluida la asistencia a los trabajadores en cuarentena que regresaban a la fábrica, según un informe de abril de un diario local.
Sin embargo, dos meses después de reanudar la producción, la maquina se ha vuelto a parar, esta vez, de manera permanente.