La escalada de la inflación obliga al BCE a adelantar el fin de los estímulos monetarios

Los tipos de interés permanecen anclados en el 0% y no subirán hasta que no finalice el programa de compras en el tercer trimestre de este año
El BCE reduce su previsión de crecimiento hasta el 3,7% y eleva al 5,1% su pronóstico de inflación en la zona euro para 2022
La guerra en Ucrania y la escalada de la inflación obliga al Banco Central Europeo (BCE) a revisar sus planes. Este jueves ha comunicado que reducirá sus estímulos monetarios y que terminarán las compras de deuda en el tercer trimestre de este año.
Las decisiones respecto a estos planes quedan sujetas a que "las perspectivas de inflación estén en línea con los objetivos", explica el BCE. Estas compras de deuda de los países del euro ayudan a mantener los tipos de financiación bajos para los gobiernos.
¿De qué estímulos monetarios hablamos?
- El programa de emergencia de apoyo por la pandemia (el PEEP) finaliza a finales de este mes. En este sentido no hay cambios.
- El otro programa de compras (el APP), que ya estaba en vigor antes del covid, se irá reduciendo a: 40.000 millones de euros en abril, 30.000 millones en mayo y de 20.000 millones en junio.
Los tipos de interés se mantienen en el 0% pero el BCE indica ahora que cualquier subida tendrá lugar en "algún momento" tras la finalización de las compras netas de activos. En cualquier cambio en los tipos de interés "será gradual".
Más inflación y menos crecimiento en 2022
El BCE ha realizado una primera estimación del impacto de la guerra en Ucrania. Reduce su previsión de crecimiento al 3,7% en 2022 (frente al 4,2% anterior) y eleva considerablemente el pronóstico de inflación desde el 3,2% hasta el 5,1%.
"La inflación ha continuado sorprendiendo al alza por el inesperado coste energético. Además, la subida de precios afecta a una base mayor de los productos", ha explicado la presidenta del BCE, Christine Lagarde, durante la rueda de prensa.
Aunque se barajan más escenarios, dependiendo de la evolución de la guerra, el banco espera un "crecimiento todavía robusto para 2022 pero algo menos intenso de lo previsto".