El crecimiento desigual de la pobreza por la covid en España: el caso de Baleares frente a Extremadura

Baleares y Canarias, sufren el mayor incremento de desigualdad salarial y pobreza. La menos afectada, Navarra
La cohesión territorial empeora, pero menos de lo esperado
Las medidas de distanciamiento social y confinamiento diseñadas para combatir la propagación de la COVID-19 están creando un incremento general de la pobreza y la desigualdad en España, pero con impactos diferenciados por comunidades autónomas, según una investigación de la Universidad Complutense de Madrid (Juan Gabriel Rodríguez y Raquel Sebastián) y de la Universidad de Oxford (Juan César Palomino).
Después de dos meses de confinamiento seguidos de otros diez de cierres parciales los investigadores han calculado que el porcentaje de trabajadores cuyo la renta ha caído por debajo de la línea de pobreza ha aumentado del 25,6% al 36,2% en España. Además, añaden que las personas que ya eran pobres antes de covid sufren las mayores pérdidas salariales.
Sin embargo este aumento no es homogéneo entre Comunidades Autónomas. Apenas se registra un cambio en Navarra y Extremadura, mientras que Baleares y Canarias se observan las mayores oscilaciones.
El aumento es mayor en las regiones centradas en el turismo con un nivel medio superior de ocupaciones cerradas que en las que tienen un promedio superior niveles de esencialidad (con más mano de obra en el sector primario) o teletrabajo (la mayoría regiones desarrolladas). Extremadura por ejemplo, a pesar de tener el nivel de teletrabajo más bajo, cuenta con mucha mano de obra en agricultura y ganadería.
En cuanto al incremento de la desigualdad salarial, las islas son también las regiones más afectadas, con un aumento estimado de la desigualdad igual a 5,3 (Baleares) y 4,6 (Canarias) puntos de Gini (escala x100). En el otro extremo encontramos a Navarra (2,3), Asturias (2,7) y La Rioja (3,0).

La pérdida salarial sufrida por los trabajadores que ya se encontraban por debajo de la línea de pobreza también muestra diferencias significativas entre las regiones. Las Islas Baleares (24,8%) son las que más sufren. Asimismo, Cantabria (23,5%), Madrid (23,4%), Valencia (23,2%), Galicia (22,0%), País Vasco (21,8%), Asturias (21,7%) y Castilla-La Mancha (21,1%) presentan pérdidas para sus trabajadores más pobres por encima del promedio nacional (20,8%).
En el extremo opuesto se encuentran las regiones con una puntuación media de esencialidad más alta: Extremadura, Andalucía y Castilla y León. Su pérdida salarial promedio es ligeramente menor, 17,5%, 17,5% y 18,3%, respectivamente.
Pese a estos datos, los investigadores concluyen que, si bien la cohesión en España se ve perjudicada con un incremento en la desigualdad interterritorial del 5,6%, los mayores aumentos en desigualdad tienen lugar dentro de las propias comunidades autónomas (17,1%). Al ser las regiones más afectadas (Baleares, Comunidad Valenciana) relativamente ricas y las menos afectadas (Extremadura, Andalucía) más pobres, “se evita que la erosión de la cohesión territorial sea aún mayor”.