Renault podría vender un 40% de sus acciones a la china Geely y otro 20% a la petrolera Aramco


El grupo francés dividiría en dos su negocio reservándose el área de eléctricos y dejando el área de combustión en manos de los nuevos socios
Estos cambios de fondo en su estructura pueden terminar afectando al devenir de sus instalaciones en España
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El Grupo Renault estaría pensando en realizar cambios de fondo en su estructura que pueden terminar afectando al devenir de sus instalaciones en España. Para empezar piensa partir su estructura productiva en dos divisiones, una que se ocuparía de los coches eléctricos y otra para el resto, principalmente los coches híbridos y puramente de combustión. En NIUS ya adelantamos hace meses que había importantes grupos automovilísticos valorando realizar dicha partición.
Según informó Reuters, Renault pretende mantener el control sobre el área de eléctricos y para ello daría entrada a dos grandes socios con el 40% y el 20% de sus acciones respectivamente. El primero sería el fabricante de automóviles chino Geely. Este importante grupo asiático no solo cuenta con una de las marcas más importantes de china, sino que además es uno de los mayores accionista de Mercedes y es el dueño de Volvo Group, que incluye a Polestar y Lynk&Co, la ex británica Lotus y la London Electric Vehicle Company, el fabricante de los clásicos taxis de Londres.
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En total, Geely vende aproximadamente 1,36 millones de coches en todo el mundo el año pasado. Este mismo año, los chinos ya le compraron a Renault el 34,02% de Renault Korea por 196 millones de euros, como vía de asentarse en aquel mercado.
La intención de Renault es poder financiar su área de eléctricos con el dinero obtenido de la venta del resto del grupo, sobre el que solo mantendría un mínimo control accionarial.

Petróleo e hidrógeno verde
Respecto al otro 20%, en cuyas informaciones iniciales ya se señalaba a una petrolera, el diario galo Le Monde ha confirmado que podría tratarse del gigante saudí Aramco, así como que Renault ya habría comentado estas intenciones con el estado francés, que es propietario del 12% de las acciones de Renault. Parece que el interés de la participación de la petrolera tiene que ver no solo con los coches de combustión, sino también con la fabricación y venta de los automóviles de hidrógeno, así como de la infraestructura de repostaje necesaria. El grupo francés es uno de los fabricantes más avanzados en este ámbito, junto con Toyota y Hyundai. El hidrógeno verde parece tener un esperanzador futuro por delante en la movilidad e infinidad de usos industriales y esta sería una de las vías de la petrolera saudí de dar los primeros pasos en esas actividades.
También ha trascendido que todas estas informaciones serán explicadas por Renault este otoño en detalle en una reunión con accionistas.

España, afectada
Uno de esos detalles a esclarecer es cómo encajaría el 15% de las acciones que Nissan posee sobre Renault. Más que nada porque también se ha hecho público que la japonesa no quiere tener parte en la división separada de coches de combustión. Por otro lado, Renault es propietario de nada menos que el 43% de las acciones de Nissan. No ha trascendido si Renault estaría dispuesta a darle entrada en la división de coches eléctricos que pretende separar.
Con esta división, cada una de las áreas quedaría formada aproximadamente por unos 10.000 trabajadores cada una. Y ahí podrían quedar afectadas las fábricas españolas que se encargan de los motores de combustión e híbridos y las transmisiones y que supuestamente quedarían comandadas por los nuevos accionistas, pues Renault solo mantendría un paquete de acciones minoritario. En situación similar quedarían las instalaciones de Portugal, Turquía, Marruecos, Rumanía e Hispanoamérica.
No obstante, según las fuentes citadas por Reuters, el plan no estaría aún cerrado y “existen otras vías para socios manufactureros”.