A prueba: Volkswagen Taigo R-Line 150 CV, un coupé sobreelevado “pintón” y con aires deportivos


Su sobrada potencia, el atractivo y equilibrado diseño y su gran maletero son algunas de sus principales virtudes
Su motor de gasolina no electrificado hace que solo se pueda adquirir con la etiqueta medioambiental C de la DGT
La evolución de las carrocerías todocamino en busca de nuevas ideas que mantengan las ventas ha derivado a estos modelos hacia un estilo coupé, más cercano al de los turismos tradicionales y también con un estilo más deportivo, más “casual” como dirían los diseñadores de ropa. Y en el caso específico del Taigo su diseño ha encajado perfectamente en lo que un comprador medio busca. Tiene una apariencia exterior agradable, con unas líneas equilibradas en las que destaca ese techo descendente estilo coupé. A pesar de ello, cuenta con un espacio razonable para cuatro pasajeros de talla media, un maletero capaz y un interior agradable, acogedor y tecnificado sin pasarse. A esto le ha añadido mayor potencia y detalles que permiten una diversión al volante algo mayor. Veamos.
Cómo es
MÁS
Hoy diseccionamos el Volkswagen Taigo R-Line 1.5 TSI 150 CV DSG, es decir, la versión a gasolina de mayor potencia de la gama Taigo con sus 150 CV en un motor de 1.500 centímetros cúbicos con caja automática de doble embrague DSG.
- Este Taigo cuenta con un motor a gasolina sin electrificación posible, por lo que solo accede a la etiqueta C de la DGT. Sus 150 CV desarrollan un par motor máximo de 250 Nm. Es un motor turbo con inyección directa, y sistema de arranque y parada automática.

- Alcanza los 212 km/h de velocidad máxima y se pone a 100 km/h desde parado en 8,3 segundos.
- Su tracción es delantera y cuenta con el conocido sistema de doble embrague DSG de 7 velocidades con levas en el volante de la marca alemana.
- En atención a este espíritu cuenta con cuatro modos de conducción: Eco, Normal, Deportivo e Individual. Es en este último donde podremos variar algunos parámetros interesantes para obtener una personalidad algo más deportiva, como la entrega de potencia y el comportamiento de la dirección.
- Se monta sobre la plataforma MQB A0 de los coches urbanos del grupo, pero con una batalla estirada. Mide 4,26 metros de largo, por 1,75 m de ancho y 1,51 m de alto. La distancia entre ejes aludida alcanza los 2,55 metros y tiene un peso total bastante contenido de 1.304 kilos.
- Su gran maletero de 440 litros ampliable a 1.22 litros con los asientos abatidos es una de sus grandes bazas. Cuenta con un gran portón, unas formas muy cúbicas y regulares, una rueda de repuesto de emergencia y un doble fondo para hacerlo aún más versátil.

- En cuanto a su utilidad en campo, se quedaría para poco más que pistas que estén en un estado razonable. Sus cotas TT (16,6 grados de ángulo de ataque y salida y 14,5 de ángulo ventral) no le hacen en absoluto apropiado para meterlo por campo, aunque es algo mejor en esas tesituras que un turismo tradicional.
- Aporta numerosos sistemas de ayuda a la conducción como el control de estabilidad, el de crucero adaptativo, la asistencia de mantenimiento de carril, alerta de colisión con frenada de emergencia...
- En confort y conectividad incluye Apple CarPlay y Android Auto, cargador inalámbrico para el móvil, doble entrada USB-C, volante de piel multifunción, climatizador de doble zona con control propio o un sistema de sonido Beat que la verdad es que suena muy bien

Cómo va
Una de las grandes cualidades de este modelo es que tiene una apariencia muy atractiva. Sus equilibradas líneas y la ruptura con la tradicional carrocería todocamino se dejan notar y llaman la atención. También hay que reconocer que su acabado Black Style que aporta diversas molduras en negro enfatizan su deportividad y le añaden atractivo.
Dentro de ese atractivo estético se podría enmarcar sus grandes llantas de 18 pulgadas. Sin embargo, como ya hemos comentado en alguna ocasión, para los coches de este tamaño no son las mejores, haciendo que su conducción sea menos acorde con sus características, elevando su precio (y el de su sustitución a posteriori), así como incrementando los consumos, al incrementarse la superficie de pisada sobre el asfalto (y por tanto el rozamiento) pero también aumentando la superficie de penetración al viento y con ello perjudicando la aerodinámica.
El Taigo aporta seguridad en su conducción. Esos caballos de más, hacen que en algunas situaciones sea muy fácil evadir complicaciones con una pisada al acelerador. Solo saber que los tienes de respaldo, ya es una tranquilidad. Y la rápida respuesta del cambio agrada y ayuda a contener consumos y a hacer la conducción más cómoda en todo tipo de vías. Las levas son el complemento para aquellos a los que nos gusta la conducción más personal. Quizá facilitan un pequeño tirón casi inevitable al arrancar, pero después mejoran su manejo general.

El maletero no solo es grande, sino muy aprovechable haciendo que parezca infinita su capacidad de absorción de maletas, “troleys”, bolsas etc. Por cierto, hay que ser ligeramente contundente con un portón que a veces prefiere continuar abierto cuando lo bajas.
El interior es muy agradable y acogedor. Me gustaría remarcar unos asientos muy cómodos que además recogen muy bien el cuerpo ofreciéndole un buen apoyo en curvas y haciendo que la conducción sea más agradable. El diseño limpio y muy ergonómico de su salpicadero y consola, deja todos los controles muy a mano.
En cuanto a espacio, con el asiento para mi posición de conducción (mido 1,82), en el asiento de atrás aún puede ir cómodamente otra persona de la misma complexión sin que el respaldo sea intrusivo. Eso sí, cinco personas no irían cómodas es la configuración para cuatro personas típica de los coches del segmento. También la altura al techo -a pesar de su caída- es suficiente para viajar sin problemas.
Y en cuanto a consumos, hemos hecho una media de 6,8 l/100 km aunque reconozco que no he tratado de realizar una conducción cuidadosa en cuanto a los consumos, sino la que es habitual en el día a día y en la conducción por carretera y autovías.

¿Interesa?
En el configurador de Volkswagen, este Taigo 1.5 R-Line de 150 CV se ofrece desde 32.790 €. Se trata de un precio algo elevado, aunque el coche lo merezca.
Desde luego practicidad no le falta. Su espacio interior, visibilidad a la hora de la conducción, maletero muy capaz. Tampoco diseño y agrado estético. Sus materiales son de buena factura y mejor acabado, con cueros, Alcántara, iluminación interior apropiada... Y anda sobrado de potencia y deportividad dentro de lo que es su segmento, con un motor que además tiene un sonido muy agradable, a pesar de estar bien insonorizado.
Por todo ello, y aunque en la gama tenemos otros motores más sencillos y precios más contenidos, este Taigo R-Line nos ha enamorado. Su compra tiene muchos aspectos que convencen y quizá, relajar un poco el bolsillo para contar con un gran coche, esté a nuestro alcance.