Dos años de retraso en la entrega de un local para enfermos neurológicos en Lora del Río

La cesión por 25 años se aprobó en un pleno local por unanimidad el 23 de diciembre de 2019
La presidenta de la Asociación de Esclerosis denuncia continuas "excusas" para no acabar con la obra
El Ayuntamiento sigue afirmando, desde agosto, que la entrega será inminente
Cualquier persona relacionada de manera directa o indirecta con las lesiones neurológicas sabrá quién es Águeda Alonso. La sevillana comenzó hace más de veinte años en el mundo asociativo, luchando por dar una rehabilitación, integración y, en definitiva, mayor calidad de vida a las personas con enfermedades neurológicas. Con 67 años casi las bodas de plata con la Asociación Sevillana de Esclerosis múltiple, Águeda, reconoce que "se te quitan las ganas de confiar en la gente, estoy enfadada conmigo mismo por seguir creyéndome la palabra de los demás".
El enfado de Águeda tiene un origen. La Asociación Sevillana realiza las labores con personas que han tenido un ictus, son diagnosticadas de ELA o han padecido algún accidente neurológico que le han dejado secuelas de movilidad, habla o coordinación. Esa tarea la realizan especialistas en fisioterapia, psicología, trabajo social en un local en Sevilla Este desde 1996 que se lo cedió el Ayuntamiento de Sevilla por cincuenta años.
Una vez situados en lo que es la asociación hay que viajar al año 2019 para conocer la problemática actual. "En ese año me llama el alcalde de Lora del Río y me dice que por qué no hacemos algo allí, nos trasladábamos y tal. Le pedí una reunión y nos reunimos. Me preguntó que que quería hacer y yo e dije que si me daba un buen local podía hacerle el mejor centro de toda Andalucía. Me dijo que sí, me llevó a enseñarme el local y me dijo que de la obra se harían cargo ellos", explica Águeda, presidenta de ASEM.
El 23 de diciembre de 2019 queda aprobado en pleno local por unanimidad la cesión del local por 25 años. "En ese momento pido un proyecto a La Caixa para materiales, contrata a gente y demás gastos". A día de hoy Águeda enseña las fotos de material apilado en su sede actual, explica que tiene camillas pagadas en la ortopedia sin poder recoger porque no tiene donde meterlas y a eso hay que sumarle que tiene "contratada a gente trabajando en la calle a la espera de poderlo hacer en un local habilitado".
"Iba a estar terminado en agosto de 2021 sin falta, luego un poco más tarde, en noviembre, diciembre, enero, febrero, hace un mes, hace dos semanas, ahora la semana que viene veremos si está, es la última fecha, pero sin demasiadas esperanzas de que sea cierto". Según relata Águeda, al principio fue el COVID el que lo retrasó todo, después "que no había dinero" y ahora sigue sin entender por qué sigue esperando.
"He ido hace un mes, le faltan las puertas, los plinto, vamos, que solo han pulido el suelo. Y encima me dicen que las ventanas no entran y son unas ventanas de hierro antiguas que no se pueden abrir y yo no puedo tener a los pacientes sin ventilación", cuenta la presidente desesperada. "Si te comprometes a algo yo creo en la palabra, tengo una tristeza tremenda de cómo tengo la asociación", lamenta.
"Ya tenía que estar completamente equipado, vamos a atender a personas afectadas por enfermedades neurológicas de la Comarca de la Vega del Guadalquivir, para lo que vamos a contratar a fisioterapeutas, psicóloga, trabajadora social, logopeda, limpiadora y vamos a equiparlo con todo lo necesario, para ofrecer una atención de calidad. Se llamará Centro de Atención Integral de Enfermedades Neurológicas Virgen de Setefilla".
30.000 euros de obra
Desde el Ayuntamiento de Lora del Río han atendido muy amablemente a este periódico explicando sus razones para el retraso de esta obra. En primer lugar, explican que es inminente la entrega del local. "Ya está prácticamente terminado, queda muy poco, lo que pasa es que esta semana estamos de feria y no se ha podido entregar pero esperamos que la que viene o, a más tardar, la otra, ya puedan entrar", aclara la concejala de Patrimonio, Marisol Díaz.
"Yo no estaba en ese momento en el Ayuntamiento, pero fue en el pleno de 2019 cuando se aprueba la cesión por 25 años. Ahí se comprometió el alcalde a entregarles el edificio acondicionado. Las obras las empezaron trabajadores municipales. Cuando llegó la pandemia, nos quedamos sin medios para continuar con la obra. Se ralentizó todo, así que decidimos contratar una empresa privada para no tener a los trabajadores públicos volcados en eso y el resto de arreglos del municipio parados. La obra tenía un presupuesto de 30.000 euros"
Marisol tiene constancia de las promesas del edil sobre las fechas que le dio a Águeda y entiende su desesperación. Ahora ella ha cogido las riendas del proyecto y cree que puede estar listo en cuestión de días. "Yo me paso por la obra casi todas las semanas, de hecho, invité a Águeda que vino hace un mes y os invito a vosotros a verlo. Ella tiene que entender que hemos hecho un esfuerzo muy grande, que nos va a venir bien al pueblo claro, pero que son 30.000 euros con los que se pueden pagar muchas cosas en el municipio".