La desaparición de Ciudadanos en Andalucía marca el futuro de Arrimadas


Las elecciones andaluzas, al minuto en NIUS
La formación naranja ha pasado de 21 escaños y ostentar la vicepresidencia de la Junta a desaparecer
Los naranjas han perdido en año y medio todo su poder autonómico
El "torrijazo" de Juan Marín, líder de Cs en Andalucía, no ha podido ni con el cocinado de las encuestas ni con la cruda realidad de las urnas. Los naranjas han desaparecido del Parlamento de Andalucía. Ni siquiera se ha salvado el escaño del candidato Marín, hasta ahora vicepresidente de la Junta. Cs Andalucía ha perdido sus 21 diputados.
De ostentar la vicepresidencia de la Junta y tener cinco consejerías han pasado a la más absoluta irrelevancia. De tener solo cinco escaños menos que el PP y hablarle de 'tú a tú' a Juanma Moreno, a la nada más absoluta. Este 19J, Ciudadanos se ha licuado como un azucarillo en el vaso de los partidos de derechas. Andalucía puede ser la tumba de Ciudadanos
El trago del 19J es una réplica exacta a lo que los naranjas experimentaron en Cataluña, después en Madrid, hace un año, y en Castilla y León, hace tres meses.
La moción de censura de Murcia en 2021 fue el pistoletazo de salida del derrumbe autonómico del partido de Inés Arrimadas. Ciudadanos pierde poder territorial, mucho y también dinero. El casi medio millón de euros que recibía por tener 21 diputados en la Junta de Andalucía, a la nada más absoluta.
El derrumbe autonómico de los naranjas
Ciudadanos lleva tres años en caída libre. El barco naranja empezó a hacer aguas tras las generales de noviembre de 2019. Perdieron 47 escaños tras el "No" de Albert Rivera a Pedro Sánchez. Se quedaron con 10 diputados. Su líder dejó la política e Inés Arrimadas tomó las riendas de un partido que se iba desinflando.
Cataluña fue el segundo mazazo. Ciudadanos había nacido allí en 2006 como azote del independentismo. Era el partido con más escaños, 36 diputados, pero las elecciones autonómicas del 14 de febrero de 2021 le dieron un amargo baño de realidad. Se quedaron solo con 6 parlamentarios y la boca abierta. Vox había entrado en el Parlament con 11 escaños.
Sin contar con Andalucía, Ciudadanos ha perdido el 50% de sus diputados autonómicos en tres años
El resto de feudos en los que Cs cogobernaba con el PP, como Madrid o Castilla y León parecían no peligrar. Pero un arriesgado movimiento en Murcia durante el mes de marzo de 2021 aceleró el hundimiento autonómico naranja.
Murcia y su efecto dominó: Madrid y Castilla y León
El 10 de marzo de 2021, el PSOE y Ciudadanos pactan dos mociones de censura en Murcia para quitar el poder al PP en el Ayuntamiento y en el Gobierno autonómico. Los populares- dirigidos por Casado- mueven ficha y consiguen que 3 de los 6 diputados naranjas no secunden la jugada, a cambio de darles cargos en el ejecutivo de López Miras. Con los tránsfugas de CS, las mociones fracasan. El PP mantiene el poder en Murcia.
En Madrid comienzan a sonar tambores de guerra. El rumor de un giro de Cs a favor del PSOE para derrocar a Isabel Díaz Ayuso es cortado de raíz. La presidenta madrileña rompe con los naranjas. Sus desavenencias con el vicepresidente Ignacio Aguado (Cs) eran 'vox pópuli'. Ayuso convoca por sorpresa elecciones anticipadas para el 4 de mayo de 2021. Aguado deja la política. Su sustituto, un aterrizado Edmundo Bal, no logra salvar la papeleta. Ayuso arrasa. Ciudadanos desaparece de la Asamblea de Madrid. De 26 diputados a 0.
"Nos negamos a desaparecer", afirmaba Edmundo Bal tras perder todos sus escaños en Madrid
El PP sueña con repetir la victoria de Madrid en Castilla y León. Días antes de Navidad, Alfonso Fernández Mañueco, el presidente de la Junta, anuncia elecciones. Su vicepresidente, el naranja Francisco Igea, se entera en directo por la radio. El enfado es mayúsculo. La debacle también. Ciudadanos solo logra un escaño, el de Igea, y pierde once procuradores. El PP se ve obligado a pactar con Vox y darle por primera vez una vicepresidencia a la extrema derecha.
"La estrategia del PP es asesinar al centro y eso es muy idiota", Francisco Igea durante la campaña electoral en CyL
Sólo quedaba el bastión andaluz. El gobierno al alimón entre Moreno Bonilla y Marín funcionaba. Ambos estaban a gusto. Pero el calendario obligaba y había que convocar elecciones. Con Vox al alza en las encuestas, y viendo el ejemplo de sus compañeros, Juan Marín ponía las barbas a remojo. "Estoy dispuesto a volver a la vida normal", ha asegurado durante toda la campaña. La mayoría de sus 21 escaños se han esfumado
Sangría política y económica
Sin contar con Andalucía, Ciudadanos ha perdido en tres años más de la mitad de sus diputados autonómicos. De los 80 escaños que sumaban en Cataluña, Madrid, Castilla y León y Murcia han pasado a 10. De 166 en toda España a 88 y falta Andalucía. La pérdida económica para las arcas del partido puede llegar, con el varapalo del domingo, a los 5,2 millones de euros. El mayor "roto" a las cuentas de Cs se lo hicieron los más de 3,5 millones de euros que dejaron de recibir del Parlament de Cataluña y el casi millón de euros de la Asamblea de Madrid.
Poco a poco el partido de Inés Arrimadas se va quedando sin poder y sin caras. La desbandada ha sido un goteo constante con cambios de chaqueta sonados como el de la portavoz de Cs, en Cataluña, Lorena Roldán que se pasó al PP o el de Toni Cantó en Madrid. La representación en las comunidades fuertes se ha perdido. Para una jerezana, como Arrimadas, la puntilla de Andalucía duele más si cabe. El futuro del partido se presenta sombrío. Y aunque en lo municipal, y como emblema aún les queda el Ayuntamiento de Madrid, Almeida ya aventuraba este miércoles, a un año de las elecciones, que quiere "gobernar solo". Villacís se abanicaba.