Consejos de la Policía para evitar que los menores se pierdan en la playa en verano

Cada verano es habitual en las playas que algún menor, sobre todo, se despiste de sus padres y se acabe perdiendo. Para alivio de todos, por lo general todo queda en un mero susto cuando el pequeño de turno es reconocido por un bañista, un agente o alguien de su familia, pero hay trucos que pueden seguirse para evitarlo. La Policía Local de Chipiona es una de las más activas en redes compartiendo este tipo de mensajes, aunque cualquier agente de cualquier municipio estará encantado de dar algunos consejos muy parecidos.

Lo primero de todo es, nada más llegar a la playa, ubicar al menor. Para esto, lo mejor es ir con él a la orilla y mirar hacia la arena, señalándole dónde esta la sombrilla. Después, para que reconozca con facilidad el lugar, lo ideal es buscar un par de puntos de referencia como pueden ser sombrillas llamativas, chiringuitos o edificios para que cuando los vea, reconozca rápidamente el lugar.

Otro truco interesante puede ser indicarle dónde está el puesto de socorrismo de vigilantes más cercano. Ir con él allí e indicarle que, en caso de problemas, allí pueden ayudarle. Para que, si acaba allí o encontrado por otra persona, sea fácil encontrar a los padres, es muy práctico colocarle una pulsera con un teléfono de contacto para llamar en caso de encontrar al extraviado.

Si pese a todo el pequeño se pierde, en el teléfono de emergencias 112 podrán ayudar y movilizarán a los efectivos necesarios para comenzar su búsqueda. No obstante, importante volver a llamar si se le encuentra sin que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado que ayudan en la búsqueda tengan constancia para así detener el dispositivo.

Por último, pero no menos importante, algo que siempre destacan los agentes es mantener la calma. Son situaciones que, por lo general, se vuelven tensas, pero hay que seguir con la tranquilidad de que el menor aparecerá.