Esteban Torres, director de la oficina de Empleo de Úbeda y poeta con casi 200 premios

Lleva más de 30 años compatibilizando su trabajo como funcionario con su pasión por escribir
Ha publicado cuatro poemarios y ha recibido premios de hasta 3.000 euros por sus versos
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Entre demandas y ofertas de empleo, late con fuerza en Jaén el corazón de un poeta. Se llama Esteban Torres Sagra y es el director de la oficina del Servicio Público de Empleo Estatal de Úbeda. Lleva más de 30 años trabajando como funcionario... pero lleva muchos más escribiendo poesía.
"Empecé en segundo de bachillerato", dice Esteban, que enseguida confiesa que escribía versos a escondidas en aquellas clases en las que se aburría. Sin salir del instituto, sus poemas ya le hicieron ganar su primer concurso de poesía y desde entonces hasta hoy ha conseguido 188 premios. "Entre segundos, primeros y accésits", apunta Esteban.
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El último que ha ganado, hace tan solo unos días, ha sido el concurso de epitafios de Monturque, en Córdoba, y ya es la segunda vez que lo gana. "El premio es un fin de semana en una casa rural", nos cuenta. Otras veces se lleva dinero, como los 3.000 euros del premio Orola de Vivencias de Madrid.
Uno de los premios que más ilusión le hizo fue un premio de sonetos en Asturias, donde obtuvo 1.800 euros. Son excepciones porque lo normal es que los premios de poesía no lleguen a los mil euros. "Suelen ser premios de 100, 300, 500 euros...", dice Esteban, que los conoce bien.
Ahora es mucho más fácil participar gracias a Internet. Sin embargo, cuando él empezó a concursar todo era mucho más complicado. Desde enterarse de las bases de un premio y saber cuándo era convocado, hasta enviar los poemas. "Había que escribirlos a máquina y a veces con calco para hacer copias", recuerda con nostalgia.
Un poeta aficionado
Todo eso ha quedado atrás. Esteban escribe casi a diario en su ordenador. "Tengo mi rincón en el salón", dice y allí se pone a componer. Muchas veces de madrugada cuando no puede dormir. "En lugar de encender la tele y molestar a mi mujer, me pongo a escribir".
Entre sus autores favoritos destaca a Amando García Nuño. "No es muy conocido, es otro poeta aficionado como yo", dice Esteban, que asegura que hoy hay más poetas que nunca. "En cambio, la venta de libros de poesía ha bajado y ya nadie compra nada", reconoce el autor, "ahora como mucho se sacan unos 500 ejemplares".
Aun así, Esteban ha publicado ya cuatro poemarios. Y aunque casi siempre escribe poesía ha empezado a coquetear con el relato... y por supuesto también ha recibido reconocimientos a su prosa, como un primer premio de relato en Órgiva, en Granada, y otro de microrrelatos en Barcelona el año pasado.
En su oficina del SEPE conocen bien su pasión por la poesía e incluso han leído algunos de sus poemas. "En el grupo de Whatsapp que tenemos los directores de oficina de Jaén me felicitan cada vez que gano un premio", dice Esteban... y eso que no suele decirlo "para no cansar mucho".
Quizá por eso durante algún tiempo lo ocultó en el trabajo, pero los premios y el Facebook se encargaron de desvelar el secreto. Humilde y constante, Esteban es un poeta serio y un funcionario cálido que ha encontrado en la escritura una forma de colar la poesía incluso dentro de una oficina donde se busca trabajo.