La urna con cenizas que reposa desde hace tres meses en la comisaría de Chipiona 'descansará' en el Santuario de Regla
Fueron unos jóvenes los que encontraron la urna el pasado 9 de octubre enterrada, a poca profundidad, en la playa de Regla
Reposan en el despacho del jefe de la Policía Local sin que nadie reclame los restos, y ahora se plantean darle sepultura en el Santuario de Nuestra Señora de Regla
Se busca al propietario de una urna con cenizas “olvidada” en la parroquia de Aroche
Hace ya más de 3 meses que una urna con cenizas preside el despacho del jefe de la Policía Local de Chipiona (Cádiz). Sobre su mesa de escritorio, entre informes y papeles, descansan los restos de un difunto cuyos familiares dejaron abandonado en la Playa de Regla. “Seguimos sin noticias, nadie ha venido a reclamarlo”, explica a NIUS Rafael Márquez, jefe de la Policía Local.
La urna, que carece de código de identificación, lo acompaña cada día en sus tareas de despacho. Rafael dice que ya se ha acostumbrado a su presencia. “No soy supersticioso. Soy de los que cree que hay que temerle más a los vivos que a los muertos”, asegura.
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La urna la encontraron en la Playa de Regla el pasado 9 de octubre unos jóvenes cuando enterraban una pelota. Estaba a poca profundidad, intacta, nueva y sin signos de haberse mojado. “Nuestra hipótesis es que el deseo del difunto era descansar en la playa para siempre, el problema es que su familia en lugar de esparcir las cenizas en la arena, algo que es ilegal, las enterró con la urna y la funda incluida”, se lamenta.
El jefe de la Policía Local asegura que, en más de 20 años de servicio, ha encontrado de todo: piernas ortopédicas, consoladores, audífonos,… pero como esto nada. Es la primera vez y espera que la última. “Que no se vaya la gente a acostumbrar a ir dejando a sus seres queridos abandonados de aquella manera”, advierte.
La urna: nuevo punto de interés durante las visitas a la Jefatura
La urna con los restos no pasa desapercibida en las visitas que, dos días a la semana, se organizan a la Jefatura. “Los hay que llegan y me preguntan por las cenizas. Algunos incómodos y otros para mostrarles sus respetos. El otro día una señora mayor incluso le rezó un Padre Nuestro”, apunta Márquez que reconoce que hay compañeros que prefieren quedarse en la puerta del despacho desde que el difunto reposa dentro.
El guardián del Santuario de Regla se ofrece a darle sepultura
Por respeto, dice, han evitado depositarla en el cuarto de incautaciones y objetos perdidos, aunque reconoce que no se puede quedar aquí eternamente. De momento, el guardián y rector del Santuario de Regla se ha ofrecido para darle santa sepultura a los restos, en el columbario. “Aunque desconocemos cuál era el deseo del difunto, podría ser la solución más óptima posible”, señala Márquez.
En un primer momento, pensaron en esparcir las cenizas en el mar pero esta opción no es tan sencilla. “Habría que pedir una autorización y nosotros no estamos legitimados al no ser familiares ni tener relación con el difunto. Por no saber, no sabemos ni quién es, ni cuál era su deseo”, recuerda.
El jefe de la Policía Local vuelve a hacer un llamamiento a sus familiares e insiste en que lo importante es el lado moral y sentimental. Descarta por ello, de momento, sanciones en caso de que alguien las reclamara. Pese a que los autores del abandono se enfrentarían a una multa de 750 euros por contaminación medioambiental. En este caso, parece que el mayor peligro, por ahora, es que el alma del difunto repose para siempre en un despacho de la jefatura de la policía de Chipiona. Nada más alejado, imaginamos, de su última voluntad.