A la venta la mítica mansión de Antonio El Bailarín en Marbella que esconde un boceto de Picasso y romances secretos


El precio de la propiedad, con más de cuatro mil metros cuadrados a pie de playa, alcanza los 30 millones de euros, aunque también es posible alquilarla por semanas
En su piscina hay una serigrafía del mismísimo Pablo Picasso que dibujó el boceto tras quedar prendado del arte del bailaor sevillano
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Si las paredes de El Martinete, la mítica mansión de Antonio El Bailarín en Marbella, hablaran darían para escribir un libro lleno de glamour, con estrellas de Hollywood, aristocracia y amores prohibidos. Ahora, el que ha sido escenario de fiestas desenfrenadas y encuentros inconfesables, está a la venta por 30 millones de euros.
Su rica historia y su ubicación privilegiada la convierten en una de las propiedades más codiciadas de la Costa del Sol. Y aunque su precio no es apto para todos los bolsillos, por una cantidad más asequible es posible pasar unos días en esta exclusiva mansión. Sentirse una estrella de Hollywood durante una semana tiene precio: entre 35.000 y 80.000 euros, según la temporada.
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Se ubica en un lugar incomparable, en primera línea de playa, próxima al glamour de Puerto Banús y a la sofisticación de Marbella. Antonio El Bailarín la bautizó con el nombre de su palo flamenco favorito: el Martinete. Un estilo percusivo y ágil, que se asemeja al martillo de un yunque de herrero y que es creación propia del legendario bailaor.
El sevillano fue una estrella del baile flamenco en la década de 1950. Recorrió el mundo durante 24 años, triunfando en América y rodando películas en Los Ángeles donde era agasajado por la realeza y las estrellas de cine de la época, como Ava Gardner y Vivien Leigh, con quien siempre se rumoreó que había mantenido un romance.
Un boceto de Picasso en la piscina
Quizá la característica más famosa y única de esta extraordinaria propiedad sea La Danza, un dibujo del mismísimo Pablo Picasso que está serigrafiado en la piscina. Según el obituario del artista que “The Independent” publicó en febrero de 1996, Antonio fue invitado al 80 cumpleaños de Picasso y el pintor quedó tan encantado tras verle bailar que “saltó por encima de la mesa que los separaba, ayudándose con una mano, se puso a bailar rumbas con Antonio, cayó de rodillas, le besó en la mejilla, luego se levantó, cogió un lápiz, esbozó un retrato del bailarín y se lo dedicó”.

El bailaor conservó el dibujo y lo hizo grabar en los azulejos de su piscina, donde permanece hasta hoy, mientras que el boceto original se conserva en el Museo Nacional del Teatro de Almagro, en Ciudad Real.
Una joya arquitectónica
El Martinete se levanta sobre una parcela de más de cuatro mil metros cuadrados y cuenta con casi dos mil construidos que se reparten entre la residencia principal con dos plantas, sótano y solarium, además de dos casas de invitados independientes.
La majestuosa grandeza de esta mansión salta inmediatamente a la vista cuando las elaboradas puertas de entrada se abren a un patio lo suficientemente espacioso para varios coches y el camino de entrada llega hasta la impresionante entrada cubierta. Al traspasar el umbral del vestíbulo de triple altura, la impresionante dimensión de esta joya arquitectónica barroca revela su rico y evocador pasado. Una lámpara araña de cristal ilumina el vasto espacio, mientras que la luz natural entra a raudales por la claraboya cubierta de la parte superior, en lo que es realmente un extraordinario espacio de entrada de columnas doradas, suelos de mármol y florituras arquitectónicas.

Al acceder al gran salón formal, la mirada se pierde a través del elegante mobiliario, la extravagante chimenea y el piano de cola hasta la amplia terraza que ofrece un espacio cubierto desde el que disfrutar de cenas al aire libre o simplemente relajarse y apreciar los cuidados jardines y la gran piscina, con su famoso diseño de azulejos.
Dado su ilustre pasado, no es de extrañar que el entretenimiento esté en el corazón de la casa. La planta baja cuenta con dos cocinas, ambas completamente reformadas recientemente en elegante mármol negro y totalmente equipadas con electrodomésticos Miele y Neff de alta gama. La cocina familiar es espaciosa y funcional, mientras que la cocina del chef, dispone de todo lo necesario para recibir invitados o disfrutar de una exquisita cena en el espacioso comedor.
En esta planta también hay una acogedora sala familiar con vistas al jardín, una gran chimenea con un ambiente acogedor, así como un despacho amplio y luminoso desde el que trabajar en una atmósfera de tranquilidad y concentración.
Las escaleras de mármol dan acceso a la primera planta con una preciosa y luminosa galería desde la que se accede a los cinco dormitorios, todos con baño privado. El principal, de 120m2, cuenta con una sala de estar, baños para él y para ella de estilo moderno, vestidor y preciosas vistas abiertas al Mediterráneo.