Adri, el niño gaditano que ha perdido su horquilla: "No ha dormido, está muy mal"

Los Reyes Magos le trajeron la horquilla al pequeño de 8 años
La dejó apoyada en el escaparate de 'El Vestidor de Mati' en la calle San Francisco
Es fácilmente reconocible porque tiene la 'U' soldada
A Adri lo conocen muy bien los cofrades gaditanos, "siempre va con su horquilla al lado de los pasos", cuenta su madre. Pero ahora, en pleno ecuador de la Semana Santa, no va a poder cumplir con su tradición. El pequeño de 8 años perdió la horquilla que le trajeron los Reyes Magos al cobijarse de la lluvia del Martes Santo. "No ha dormido, está muy mal, solo espero que el que la tenga nos la devuelva", explica Karen, su madre, desesperada por ver a su hijo roto de tristeza.
"Para él es como si nosotros perdemos una casa. Tiene 8 años, es muy pequeño y no entiende", relata su madre con las lágrimas saltadas. "Se la regaló su abuela por Reyes. Él siempre ha tenido una horquilla de esas que venden en cualquier sitio por tres euros. Cuando se la trajeron, se volvió loco de alegría. Por eso está siendo tan duro para él haberla perdido".
Colaboración ciudadana
En las últimas doce horas la familia de Adri no ha parado de moverse para encontrar la horquilla del niño gaditano, "lo he publicado en Facebook, la gente está respondiendo muy bien, nos están ayudando. Solo espero, de verdad, que el que la tenga nos la devuelva o que al difundirlo alguien la vea por la calle".

"No ha dormido, está muy mal, cayó a las 6 de la mañana ya por cansancio. Su abuela le dice que no se preocupe que ponemos una vaquita y compramos otra. No lo entiende, dice que no es justo que otro niño tenga su horquilla", ha explicado Karen a NIUS.
Una horquilla "única"
"Fuimos a ver a 'El Caído' y empezó a caer la que cayó, así que bajando San Francisco nos cobijamos en el escaparate del 'Vestidor de Mati'. En cuanto escampó un poco decidimos coger la escapadita y correr calle abajo. Poco después nos dimos cuenta que no llevábamos la horquilla. Aunque mi marido subió corriendo, con tanta gente y la lluvia, la horquilla ya no estaba", relata la madre.
El valor sentimental no es lo único que hace a la horquilla de Adri "única" en toda Cádiz. "Hace unas semanas se le rompió la U y 'El viejo', que lo llamamos aquí, se la soldó. Por tanto, es fácil reconocerla. Está soldada, no hay otra así".