200 científicos presentan un manifiesto contra la celebración de los JJ.OO. de Invierno en el Pirineo


Ecólogos, biólogos, geólogos, historiadores, arqueólogos y economistas rechazan que sean sostenibles, tal y como defiende la Generalitat catalana
Presentan un decálogo de los impactos negativos que evento puede suponer sobre las economías locales, paisaje y ecosistemas
Sostienen que la mayoría de estaciones de esquí del Pirineo serán inviables a finales de siglo
Un total de 180 investigadores de 14 universidades de Cataluña y también de Francia han firmado un manifiesto en el que rechazan la propuesta de celebrar unos Juegos Olímpicos de Invierno en el Pirineo en 2030 por los efectos nocivos que tendrán en el entorno. Lo hacen después de que Cataluña y Aragón se hayan abierto a colaborar en la organización del evento.
Ecólogos, biólogos, geólogos, historiadores, arqueólogos y hasta economistas suscriben un manifiesto contra los JJ.OO. en el Pirineo en el que rechazan el argumento de la Generalitat catalana que sostiene que serán sostenibles.
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Los expertos han firmado a título individual y trabajan en instituciones como como la Universidad Autónoma de Barcelona, la de Barcelona, la de Girona, el CREAF (centro de investigación en ecología), la Universidad de Toulouse o el Centro Nacional de Investigación Científica francés.
El manifiesto expresa la "preocupación por el impacto negativo y las pérdidas que estos grandes eventos deportivos pueden tener sobre las economías locales, los paisajes rurales y los ecosistemas de los Pirineos" y detalla diez motivos para rechazar su celebración.
Propuesta "poco transparente" y sin "evaluación ambiental"
Los expertos argumentan que la propuesta es “poco transparente y no contiene el documento preceptivo de evaluación ambiental”. Añade que “la mayoría de estaciones de esquí del Pirineo serán inviables a finales de siglo” y que “los Juegos solo se podrán realizar con un aumento del consumo de energía, agua y un aumento de la contaminación”.
El plena sequía por la escasez de las reservas de agua, defienden que "el actual consumo de agua de las estaciones de esquí para la producción de nieve artificial reduce la disponibilidad del agua para otros usos". Añaden que el turismo ejerce "una presión directa sobre la biodiversidad" y que las actuales estaciones de esquí "no son rentables económicamente" ya que la Generalitat catalana ha rescatado a siete estaciones.
Es por ello que consideran que los JJ.OO. de Invierno "no aportarán riqueza a los Pirineos" sino que "agravarán el desequilibrio y la dependencia que sufren las comarcas pirenaicas" y la ampliación de algunas pistas pondrá "en riesgo la preservación de determinados yacimientos arqueológicos".