Musicoterapia en el Hospital de Calella para pacientes en paliativos: "La música entra directa en vena"


Las sesiones se llevan a cabo una vez por semana por parte de una musicoterapeuta profesional
Cada sesión está preparada específicamente para cada paciente en función de su estado
La música facilita el acceso a rincones personales y recuerdos de la vida de los pacientes
Miquel Roger llora cada vez que su musicoterapeuta le toca su tema favorito con el piano. Lleva muchos meses ingresado en el Hospital de Calella y esta nueva actividad le ha devuelto la sonrisa. Este centro sanitario lleva desde el mes de abril ofreciendo musicoterapia a los pacientes de la Unidad de Paliativos y de Larga Estancia. Su objetivo es utilizar la música para mejorar la calidad asistencial de estas personas.
La musicoterapia es una manera de trabajar las emociones con las personas mediante la música. "La música tiene un lenguaje propio y único, es por eso que es capaz de abrir y llegar a aspectos que de otro modo costaría mucho o directamente, no se podría llegar", explica Lourdes Bartrolí, musicoterapeuta.
Etapas de final de vida
Las sesiones, que se llevan a cabo una vez por semana por parte de una musicoterapeuta profesional, están dirigidas a pacientes y familiares y están orientadas a la mejora del bienestar emocional, bienestar físico y el acompañamiento en etapas de final de vida.
"Es una terapia complementaria, buscamos de qué manera podíamos complementar la atención que se presta en el hospital", asegura Jordi Valls, director de atención sociosanitaria de la Corporació de Salut del Maresme i la Selva (CSMS).
Es una buena herramienta para que estas personas, que están en una situación de sufrimiento elevado, tengan maneras de expresarse
Durante el rato que dura la actividad, la musicoterapeuta, con la ayuda de diferentes instrumentos, acompaña al paciente y a sus familiares con música que tiene un significado para ellos. De esta forma, se facilita el acceso a rincones personales y recuerdos de su vida que inciden positivamente en sus esferas emocionales y espirituales.
"Consideramos que el vehículo que facilita la música como elemento de expresión es una buena herramienta para que estas personas, que están en una situación de sufrimiento elevado, tengan maneras de expresarse", insiste Valls.
Sesiones personalizadas
Hasta el momento, estas sesiones de musicoterapia están teniendo muy buena acogida tanto por parte de pacientes como de familiares. Cada sesión está preparada específicamente para cada paciente en función del
su estado. "Es la posibilidad que tu puedas trabajar a través de la música alguna situación personal. La música es como que entra en vena y va directa a la emoción, nos hace abrir aspectos que otras veces no se pueden abrir", asegura Lourdes Bartrolí.
Esta nueva actividad que se ha podido poner en marcha gracias al convenio firmado entre la Corporación de Salud del Maresme y la Selva y Servicios Funerarios Cabré y Junqueras, que financia la actividad, y en la colaboración de la Asociación de Voluntarios y Amigos del Hospital (AVAH), quien ha hecho la donación de un teclado en el centro para poder complementar la actividad.