El incendio del Cap de Creus es el más importante en Cataluña este año: "No podemos permitirnos otro"

El incendio declarado este viernes en Llançà y Port de la Selva (Girona) sigue ardiendo tras una noche "muy complicada" para los Bomberos de la Generalitat, que a última hora del sábado dan por estabilizado entre el 60 y 70 % de su perímetro. El fuego ha arrasado 420 hectáreas y su avance hacia el segundo municipio catalán ha elevado la cifra de desalojados a 350 vecinos, lo que lo convierte en "el incendio más importante" declarado en Cataluña este año, según el Govern.

El vicepresident del Govern, Jordi Puigneró, ha visitado la zona y ha pedido precaución: "Estamos en una época muy seca, tenemos 13 comarcas con alto riesgo de incendio y no nos podríamos permitir un segundo incendio en otra zona de Cataluña". En este sentido, ha valorado que "la simultaneidad de incendios haría muy complicada la extinción de este incendio y de los que se puedan suceder".

Por ello, ha pedido extremar "al máximo" la precaución porque "el 40 % de los incendios son provocados por negligencias y se pueden evitar. Una colilla son 50 años de reforestación y esto no nos lo podemos permitir", ha aseverado.

El conseller de Interior, Joan Ignasi Elena, cifra en cerca de medio millar las hectáreas afectadas, la mayoría de ellas (unas 300 ha) en Port de la Selva y, en menor cantidad, en Llançà (75 ha) y Selva de Mar (42 ha); la práctica totalidad se encuentra dentro del Parc Natural del Cap de Creus y podrían arder hasta 2.000 hectáreas.

Al monasterio de Sant Pere de Rodes y las primeras urbanizaciones desalojadas este viernes, Vall de Santa Creu, Beleser y Santa Isabel, se les suma la primera línea de casas de Mora Dos, Perebeua y Barlovent; también una masía y 120 personas de un campin.

Los ayuntamientos de Llançà y Port de la Selva han habilitado sus correspondientes pabellones para acoger a los vecinos que lo necesiten. No obstante, muchos han preferido dirigirse a domicilios de familiares y amigos, mientras más de un centenar han dormido la noche del viernes en el pabellón de Port de la Selva. Las autoridades han permitido a la gran mayoría de los evacuados volver la noche de este sábado.

Asimismo, las administraciones han pedido que nadie trate de acceder a dichos municipios, de igual forma que los vecinos, que no han recibido la orden de confinarse por el momento, tampoco pueden salir de ellos porque las carreteras están cortadas para el uso por parte de los servicios de emergencias.

El viento de tramontana, el alto riesgo de incendio y las altas temperaturas avivan las llamas y dificultan extremadamente su control. "El perímetro ha sido muy inestable" durante la noche por los cambios de dirección del viento, que han generado "varios focos secundarios". De hecho, uno de ellos, originado a unos mil metros fuera del perímetro, ha abierto al flanco izquierdo, según las autoridades.

Efectivos terrestres de Bomberos han trabajado toda la noche sobre el perímetro, solo los medios aéreos se han retirado y se han incorporado a partir de las 7 h del sábado. El dispositivo cuenta con más de 80 dotaciones que combinan "líneas de agua, herramientas manuales y fuego técnico con el apoyo de las descargas de medios aéreos para cerrar el perímetro del incendio, que, de momento, está abierto".

Este sábado "continuará la tramontana, las humidades relativas son bajas y se prevé un aumento de las temperaturas", valoran fuentes de Bombers, que han pedido ayuda a efectivos franceses.

El Sistema d'Emergències Mèdiques ha atendido a cuatro bomberos y a un efectivo de las Agrupaciones de Defensa Forestal (ADF), todos heridos leves, al menos uno de ellos por un golpe de calor. Mientras, el Servei Català de Trànsit mantiene cortadas cuatro carreteras: la GI-612 y la GIV-6121 en Port de la Selva en los dos sentidos de la marcha, la GI-613 en Roses dirección Port de la Selva y GIP-6041 en Vilajuïga también en ambos sentidos.

El ocupante de un vehículo que circulaba por la carretera que une Llançà y Port de la Selva sería el presunto autor del incendio.

Las investigaciones, aún abiertas, trabajan en "la hipótesis de una colilla como causante del fuego" tras haber localizado una en el punto de su origen.