La jueza solicita a la Guardia Civil un contrainforme sobre el disco duro de Déborah Fernández

La solicitud se produce después de que una empresa tecnológica concluyese que fue manipulado
El dispositivo regresa a la misma unidad de la Benemérita que hace unos meses dijo que no podía acceder a la información
La familia de la joven viguesa se muestra sorprendida por la petición y lo valora como un retroceso en la investigación
La investigación sobre el caso de Déborah Fernández se centra ahora en el análisis del disco duro. La jueza del juzgado de instrucción número 2 de Tui ha solicitado al Departamento de Ingeniería del Servicio de Criminalística de la Guardia Civil un contrainforme del disco duro del ordenador de la joven.
Esta diligencia se produce después de que los peritos de Lazarus Technology remitiesen a ese juzgado un informe en el que concluían que el dispositivo había sido manipulado por alguien experto para alterar y borrar datos. Según las conclusiones de los ingenieros, la manipulación del disco se produjo tras ser recogido por la Policía en el año 2006 y cuando estaba bajo su custodia.
Vuelve a la misma unidad que no pudo analizarlo
Tras las declaraciones de los peritos ante la jueza, el pasado 26 de mayo, esta decidió pedir un nuevo informe al Grupo EDITE de la Guardia Civil de Pontevedra. Sin embargo, desde ese servicio informaron al juzgado que no podían hacer ese tipo de informes periciales y que debían dirigirse al Departamento de Ingeniería de Criminalística.
Ese disco duro ya pasó en su día por las manos de los agentes, tanto del EDITE como de Criminalística. Los agentes del EDITE lo intentaron clonar en 2020. El dispositivo empezó a echar humo y tuvieron que desistir. Días después se envió el aparato a Madrid, a la unidad de Criminalística, que elaboró un informe en el que los expertos señalaban que no había sido posible acceder a la información porque el chip de memoria estaba “dañado o defectuoso”.
El informe volverá, por lo tanto, a la misma unidad que en 2021 informó al juzgado de la imposibilidad de realizar la pericial. Por eso, esta decisión ha causado una enorme sorpresa entre los familiares de Déborah.
Un paso atrás en la investigación judicial
La familia de Déborah Fernández considera que esta diligencia supone un paso atrás en el proceso abierto para esclarecer la muerte de la joven viguesa en el año 2002.
Los familiares entienden que el informe presentado por los especialistas de Lazarus Technology ofrece unas conclusiones “claras, contundentes y que no admiten duda alguna”.
“Volveremos a septiembre de 2020”, lamentan, reiterando que no entienden el motivo por el que la instructora pide ahora a la Guardia Civil que revise las conclusiones de los expertos de Lazarus.
El 30 de abril se cumplieron 20 años de la muerte de la joven viguesa, por lo que el caso ha prescrito a excepción de para el único investigado, el exnovio de la joven.