La flota gallega no descarta protestas tras el veto a pescar en áreas del Atlántico: “El perjuicio es enorme”


La decisión afecta directamente a unos 80 barcos gallegos que utilizan artes de fondo en esas zonas
Sin embargo, desde las cofradías sostienen que la medida acabará afectando a toda la flota
“No nos vamos a quedar con los brazos cruzados”, dice el presidente de la Federación Nacional de Cofradías de Pescadores
Una sensación de enorme indignación recorre este viernes los puertos pesqueros de Galicia. La desazón es total, sobre todo, en aquellos que tienen barcos que faenan en el Gran Sol. Todos coinciden en que el veto de la Comisión Europea a la pesca de fondo en 87 áreas del Atlántico tendrá consecuencias devastadoras para la flota gallega.
Galicia es la zona más afectada de España. Hay unos 80 barcos que sufrirán de forma directa esta decisión, ya que tradicionalmente pescaban en esas áreas. Sin embargo, Basilio Otero, presidente de la Federación Nacional de Cofradías de Pescadores y patrón mayor de Burela (Lugo), asegura que toda la flota gallega se va a ver, en mayor o menor medida, afectada.
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“Quitando el marisqueo a flote y los barcos que faenan por la ría, esta prohibición nos va a acabar afectando a todos. Los barcos que iban a pescar a esas zonas ahora vetadas tendrán que desplazarse a otras, y eso tendrá consecuencias también para otros barcos. El perjuicio es enorme”, sostiene. Otero recalca que no solo se está vetando a la flota de arrastre, sino también al palangre y a otras artes fijas.
La franja afectada por la prohibición se extiende desde el golfo de Cádiz hasta Glasgow (Escocia) y abarca un área de algo más de 16.400 metros cuadrados. En total, alrededor de mil barcos de España, Portugal, Francia e Irlanda que utilizan artes que tienen contacto con el fondo marino serán expulsados de los que eran sus caladeros tradicionales.
“Esto es algo muy grave para la flota de arrastre y el palangre de fondo”, recalca Otero. En Galicia, la mayoría de barcos que van a esa zona se encuentran en los puertos lucenses de Burela y Celeiro, en el coruñés de Ribeira y en el de A Coruña.
Sin un informe científico solvente
Los representantes del sector pesquero critican que esta decisión tomada para salvaguardar el ecosistema marino se haya hecho con un informe científico que es, según aseguran, "poco solvente" y sin haber tenido en cuenta al sector. "Creemos que esto va a suponer la muerte para el palangre de fondo que pescaba en esas zonas", advierte Javier Touza, presidente de la Cooperativa de Armadores de Pesca de Vigo.
La indignación es mayor teniendo en cuenta que la responsable de Asuntos Marítimos de la Comisión Europea, Charlina Vitcheva, estuvo el pasado mes de julio en Galicia y se comprometió a estudiar nuevos informes.
“Lo hacen, supuestamente, para proteger los corales de aguas frías. Pero está basado en un informe con muchas lagunas y dirigido a una modalidad concreta, que era el arrastre, y no ha tenido en cuenta otras modalidades como el palangre de fondo o las artes fijas en general. Nuestra flota lleva pescando ahí toda la vida y si esos corales están ahí es porque no han causado daño alguno a esos ecosistemas”, explica José Beltrán, secretario técnico de la Asociación de Productores Pesqueros de Burela.
La conselleira do Mar, Rosa Quintana, se mostraba este jueves dispuesta a recurrir a la vía judicial si Bruselas no da marcha atrás. El presidente de la Xunta Alfonso Rueda, ha destacado este viernes el “grave perjucio” que supone para “cientos de barcos gallegos”. “Le pediremos a España que utilice toda su influencia para intentar revertirlo”, ha dicho.
Mientras, las asociaciones de pescadores mantienen a este viernes reuniones para marcar una hoja de ruta. “No podemos quedarnos de brazos cruzados cuando hay una afectación tan enorme”, manifiesta Basilio Otero.
El responsable de la Federación Nacional de Cofradías de Pescadores no descarta la convocatoria de protestas para mostrar el malestar de la flota por esta decisión y asegura que recurrirán la medida. “También pediremos la dimisión del comisario de Medioambiente (en relación a Virginijus Sinkevicius). No se pueden hacer esto sin un análisis socioeconómico previo y sin contar con informes científicos", recalca.
La medida entrará en vigor a los 20 días de su publicación en el Diario Oficial de la Unión Europea. Todos los esfuerzos del sector pesquero se concentran ahora en preparar recursos que permitan suspender la ejecución de esa decisión.