Alu Ibérica estudiará la propuesta de Alcoa pero la tacha de "chantaje"

Los trabajadores de la planta de A Coruña se han manifestado este jueves
Alcoa pide encontrar "un acuerdo global"
El Comité de Empresa de Alu Ibérica critica a la multinacional de actuar con "prepotencia"
El comité de empresa de Alu Ibérica estudiará la propuesta que Alcoa ha dado a conocer este jueves para encontrar "un acuerdo global" que acabe con los procedimientos judiciales vinculados a las plantas de A Coruña y Avilés.
Así lo traslada el presidente del comité de empresa de Alu Ibérica A Coruña, Juan Carlos López Corbacho, aunque tacha esta propuesta de "chantaje" al matiza que se trata de una propuesta y no de un acuerdo.
Corbacho considera que la multinacional actúa con “prepotencia” y "que hace lo que le da la gana porque el Gobierno se lo permite" y culpa a la compañía: "ellos licitaron a quienes entraron en la planta".
"Tendríamos que tener una planta moderna y se despreocuparon", ha criticado. Ha aseverado además que los trabajadores no van a "blanquear cualquier delito que haya podido acometer la multinacional sin más", que "debería asumir todas las consecuencias".
Manifestación de los trabajadores
Este mismo jueves en el que Alcoa ha hecho pública la propuesta, los trabajadores se han manifestado en A Coruña para volver a pedir “una solución para la fábrica" y "la intervención por parte de la SEPI".
Respecto a la propuesta de la multinacional, la compañía espera que "permita una solución rápida y razonable" para todas las partes involucradas.
La propuesta de la multinacional
La propuesta está condicionada a que todas las partes acepten un acuerdo global. Para lograrlo, Alcoa y las dos administraciones concursales de Alu Ibérica Avilés y Alu Ibérica A Coruña llevan semanas negociando el acuerdo de despido masivo que deberá ser aprobado por los trabajadores de las dos empresas.
"Un acuerdo global beneficiaría a todas las partes y, en el caso de Alcoa, permitiría centrar sus esfuerzos en su negocio actual en España", han señalado desde la empresa aluminera.
Las plantas fueron vendidas a Parter en 2019, en un proceso avalado por el Gobierno español y respaldado por los representantes de los trabajadores.
"Alcoa siempre actuó con total transparencia y de conformidad con la legislación española en el proceso de venta. Sin embargo, las acciones de los posteriores propietarios han tenido un impacto negativo en los exempleados que permanecen en las plantas, lo que ha resultado en varios procedimientos judiciales", han asegurado desde Alcoa.
En cualquier caso, Alcoa tiene la intención de continuar adoptando todas las medidas legales que procedan contra los compradores de las plantas, ya que son sus actuaciones las que han creado la situación perjudicial que afrontan Alcoa y sus exempleados. Si no se logra un acuerdo, la compañía cree firmemente que su recurso actual ante el Tribunal Supremo debería prosperar.
Colaboración y diálogo constructivo
Alcoa confía en la "colaboración" con las partes interesadas y en que se mantenga un "diálogo constructivo". En este sentido, Alcoa y sus trabajadores llegaron a un acuerdo a finales de 2021 para promover la viabilidad de la planta de aluminio de San Cibrao.
La intención actual de la compañía es centrar todos sus esfuerzos en España en el futuro de la fábrica de San Cibrao, realizando las inversiones necesarias, colaborando con todas las administraciones implicadas y, sobre todo, manteniendo el compromiso con los trabajadores, "cuya implicación es fundamental".