Valencia diseñará un plan especial para delimitar las terrazas y controlar el botellón

El alcalde de la ciudad ha señalado que se vigilará que los negocios respeten los metros cuadrados que tienen autorizados
Según Ribó, el control de las terrazas es, además, “un mecanismo de prevención del botellón”, especialmente en la plaza Honduras, del Cedro y en Ruzafa
La intención del consistorio es poner en marcha un plan específico cuando se recepcionen las obras previstas para la plaza del Mercado
El Ayuntamiento de Valencia ha informado de su intención de llevar a cabo un plan específico para marcar el espacio al que deben ceñirse las terrazas de hostelería en las calles de la ciudad. Al mismo tiempo ha expuesto que lanzará campañas de sensibilización para reducir el consumo de alcohol de los jóvenes en la calle. Unos planes que espera ejecutar, una vez que se hayan recepcionado las obras previstas para la plaza del Mercado, en pleno centro de Valencia.
Así lo ha confirmado el alcalde de la capital del Turia, Joan Ribó, en una reunión mantenida este viernes con el concejal de Protección Ciudadana, Aarón Cano; la concejala de Espacio Público, Lucía Beamud, y el comisario principal jefe de la Policía Local, José Vicente Herrera.
Ribó ha explicado que no se pueden delimitar las zonas reservadas a mesas y sillas en el centro histórico hasta que no se recepcionen las obras. El máximo responsable municipal ha remarcado que “los espacios para peatones tienen que ser para todos”, por lo que se vigilará que los negocios respeten los metros cuadrados que tienen autorizados y, en caso “de incumplimiento reiterado”, se les retirará el permiso.
130 sanciones en terrazas
Además, el control de terrazas es, según el alcalde, “un mecanismo de prevención del botellón”, especialmente en la plaza Honduras, del Cedro y en Ruzafa, entre otras. En ese sentido, ha recordado que durante el mes de mayo la Policía Local ha intensificado la inspección, porque en esta época hay un repunte del botellón coincidiendo con el final de curso y el buen tiempo.
En concreto, los agentes han revisado 1.100 terrazas y han abierto 130 actas. En los alrededores del Mercado Central y la Lonja solo se han sancionado a dos locales por superar la superficie permitida.
Por su parte, Aarón Cano ha indicado que “las acciones preventivas y reactivas”, refiriéndose al control de las terrazas y la presencia policial, se reforzarán con campañas de sensibilización para minimizar “el exceso de consumo de alcohol”, similares a las que se hicieron en torno al tabaco.
El titular de Protección Ciudadana ha incidido en que el botellón altera el derecho al descanso del vecindario, al mismo tiempo que es un problema social. “El alcohol se concibe como un elemento transversal de las relaciones sociales”, es “la puerta de acceso de drogas” y ocasiona “accidentes de tráfico o episodios de violencia”.
“Un problema, no una guerra”
Cano ha advertido de que el botellón no es “una guerra, sino un problema; estamos hablando de nuestros hijos y de los hijos de nuestros amigos”. Por eso, “hay que incorporar el factor educacional”. Asimismo, ha anunciado que se fortalecerá la presencia policial en las playas, donde se registra mayor concentración de consumo de alcohol al aire libre durante estas fechas.
Por su parte, la regidora Lucía Beamud ha puesto de relieve “la política activa de recuperación de espacios para peatones que lleva a cabo el gobierno de Joan Ribó en el centro de Valencia y en el resto de barrios y pueblos”, y ha subrayado que son “plazas para el disfrute de las personas”.
En esa línea, ha recalcado el diseño de un plan específico de “marcaje” de las zonas reservadas a hostelería de la plaza del Mercado y ha reiterado que el número de terrazas de la plaza de la Reina no se ampliará, sino que se mantendrá.