Detenidos en Alicante por robar más de 1.800 kilos de cable de cobre en urbanizaciones


Los arrestados, un hombre y una mujer de 51 y 40 años, respectivamente, vendían el cable sustraído, en pequeñas cantidades, en los desguaces de Alicante
El hombre arrestado había trabajado como instalador eléctrico y accedía a las urbanizaciones con una llave exclusiva, propia de los trabajadores del sector, y ropa específica para no levantar sospechas
Con su detención, se han esclarecido 51 robos con daños en comunidades de vecinos afectadas por valor de más de 40.000 euros
La Policía Nacional ha detenido a un hombre y una mujer de 51 y 40 años, respectivamente, por el presunto robo de 1.810 kilos de cable de cobre que sustraían de las instalaciones eléctricas de comunidades de vecinos y urbanizaciones de Alicante, Mutxamel, Sant Vicent del Raspeig y El Campello. Unos robos por los que ocasionaron daños por valor de más de 40.000 euros.
El arrestado tenía amplia experiencia en el sector, ya que había trabajado como instalador eléctrico durante más de 30 años. Los detenidos vendían el cable sustraído en pequeñas cantidades en los desguaces de Alicante para no levantar sospechas sobre su ilícita procedencia, tal y como se informa desde la Jefatura Superior de la Policía Nacional.
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Un antiguo instalador eléctrico
Para acceder a las comunidades de vecinos y urbanizaciones, el ladrón utilizaba una llave exclusiva que tenían los trabajadores del sector e iba vestido con ropa de trabajo específica de sus antiguos trabajos para evitar levantar sospechas.
Una vez estaba dentro del edificio, con herramientas específicas manipulaba los cuadros eléctricos del cuarto de contadores, cortando los que salían hasta las viviendas. Después se dirigía a las plantas superiores del edificio, donde retiraba la tapa que protege el conducto de cableado eléctrico y cortaba el otro extremo de los cables con total seguridad.
Ante su amplio conocimiento como instalador, que le permitía manipular las instalaciones eléctricas sin riesgos, el detenido sabía qué comunidades o urbanizaciones elegir para su fechoría, en función del beneficio económico que le podría reportar, o qué componentes son los de mayor valor y fácil venta.
Las evidencias que llevaron a la detención
De nuevo, su experiencia en el gremio de la electricidad le servía para estudiar el consumo de los contadores y así detectar las viviendas que no estaban habitadas. Vendía al peso, en chatarrerías de Alicante, el cobre extraído previamente de su envoltura, siempre en pequeñas cantidades para no levantar sospechas y con la colaboración de la mujer.
La inspección reveló la existencia de huellas, lo que junto a las grabaciones de las cámaras de alguna de las comunidades de vecinos afectadas llevó a la identificación del sospechoso. Durante un año vendió hasta 1.810 kilos de cobre en chatarrerías con un beneficio total de 10.858 euros.
Ambos investigados fueron localizados y detenidos cuando circulaban en el vehículo del hombre y llevaban a bordo del mismo gran cantidad de cable de cobre pelado preparado para su venta y múltiples herramientas.
51 robos por valor de más de 40.000 euros
Finalmente, un registro domiciliario permitió recuperar más cantidad de cobre procedente del cableado sustraído. En total se han esclarecido 51 robos, con daños en las comunidades de vecinos afectadas por valor de más de 40.000 euros.
El arrestado ha sido puesto a disposición del juzgado de instrucción de guardia de Alicante y la detenida, también con antecedentes, en libertad tras prestar declaración y ser advertida de su obligación de comparecer cuando sea requerida.