ONGs denuncian el acoso de las embarcaciones a las ballenas en las costas de Dénia y Xàbia

La Associació EDMAKTUB ha grabado imágenes de lanchas motoras persiguiendo y hostigando a las ballenas en la costa valenciana
Los investigadores y profesionales insisten en la importancia de no acosar a los cetáceos que se estresan con estas actitudes que "desgraciadamente, ocurren con mucha frecuencia"
La manera de interactuar con estos animales está reglada y su incumplimiento es denunciable y puede acarrear sanciones
La Associació EDMAKTUB ha grabado imágenes de ballenas acosadas por lanchas y embarcaciones deportivas en la costa valenciana, concretamente en Dénia y Jávea, el punto geográfico donde más delfines y ballenas se observan en esta zona, según informan los investigadores y equipos de vigilancia.
También han observado este aspecto los investigadores que participante el proyecto CaboRorcual, que se lleva a cabo desde el Campus de Gandía de la Universitat Politècnica de València, muy preocupados por estas imágenes que aseguran “estresan mucho a estos animales”.
Las ballenas rorcuales (Balaenoptera physalus) son una de las especies que menos se conocen, y gracias a este proyecto de investigación que se complementa con el trabajo que realizan desde la ONG EDMAKTUB, se cuenta cada vez con más datos que ayudan a su protección.
Desde que comenzara la época de mayor avistamiento de estos animales, que se da entre los meses de mayo y septiembre, se han registrado alrededor de 50 ejemplares de rorcuales en esta zona de la costa valenciana.
Por parte de los profesionales se insiste en la importancia de “respetarlos, ya que se puede disfrutar desde la distancia de este espectáculo mágico”, señala Toni Martínez, guardacostas del Ayuntamiento de Dénia.
Protocolo de avistamiento de los rorcuales
De hecho, la forma de interactuar con estos cetáceos, como con los delfines, está reglada. La distancia respecto a ellos no puede ser inferior a 300 metros y, aun así, a más de esta distancia se debe moderar la velocidad y no interferir en su rumbo.
Además, se debe navegar de manera paralela a ellas sin hacer cambios bruscos de rumbo, ni de velocidad. En el mismo sentido, está totalmente prohibido que las embarcaciones naveguen dentro del radio de 60 metros alrededor del rorcual.
Pero Martínez insiste en que, sobre todo, lo más importante es insistir en que “no se les puede acosar por detrás porque se estresan y desgraciadamente, esto es algo que ocurre con mucha frecuencia”, afirma.
Actuaciones ilegales cómo las que se reflejan en las imágenes, que persiguen investigadores y vigilantes, son denunciables y sancionables, con el fin de proteger al máximo a estos cetáceos, calificados como los más grandes del planeta, después de la ballena azul.