Muere atropellada Tanca en Castellón, la perra que nunca dejó de huir

Después de cuatro meses de huida continua, Tanca, una podenca marrón de dos años, ha muerto atropellada este domingo en una carretera entre las localidades castellonenses de Azúebar y Soneja a 25 kilómetros de donde desapareció.

Se confirman así los peores presagios de los voluntarios del Grupo de Rescate y Adopciones de Castellón que desde el pasado mes de marzo estaban buscando de forma exhaustiva a Tanca. "Estamos sin palabras, sin lagrimas, abatidas. Hasta siempre luchadora, guerrera, superviviente", con estas palabras despedían al animal los voluntarios de este grupo en su cuenta de Facebook.

Voluntarios que no han dejado de buscarla en este tiempo para tratar de apartarla de las carreteras. Casi medio centenar de voluntarios, que no dudaban en comprobar cada uno de los avistamientos notificados por vecinos y conductores que enviaban mensajes a través de redes sociales o incluso fotografías del animal en carreteras y pueblos de la zona.

Un trabajo que estaba cerca de dar sus frutos, ya que tenían localizada a Tanca después de mucho tiempo de búsqueda. "Ha sido un calvario que ya parecia q llegaba a su fin. Pero asi no asi no. Ella no se lo merecia ni la gente q ha ayudado tener este final tan amargo y doloroso", lamentan en la cuenta de la asociación.

La perra fue encontrada abandonada en Vilafamés (Castellón), desde ahí pasó sin problemas por diferentes casas de acogida, pero cuando llegó a su hogar definitivo en Almenara el pasado mes de marzo, se escapó y desde entonces recorrió centenares de kilómetros entre los pueblos de la zona siguiendo principalmente las diferentes carreteras. Esto provocó la alerta del Grupo de Rescate y Adopciones de Castellón que desde ese momento ha hecho todo lo posible para encontrarla con vida. "Como podremos agradecer todo el apoyo, animo de todo lo q se ha hecho por nuestra Tanca. Jamás de los jamases podremos acabar de agradecerlo".