Los turistas energéticos llegados de Europa llenan los campings valencianos: "Ahorramos mucho en luz"


Miles de jubilados procedentes del norte de Europa pasan el invierno en cámpings de la Comunidad Valenciana
El precio medio de una estancia de un mes en un cámping es de 400 euros en invierno, menos de lo que pagan por la luz y el gas en sus países
La mayoría proceden de Noruega, Alemania y Holanda
Los turistas del norte de Europa, principalmente los jubilados, encuentran en España un paraiso para disfrutar de un invierno con un clima templado, buena comida y la playa. A todas estas razones, este año suma una nueva, el coste de la luz y el gas en sus países de origen se ha disparado. "En Noruega la electricidad es muy cara. Hay gente que se levanta a las tres de la madrugada para poner la lavadora y duerme con muchas mantas para no encender la calefacción", lo cuenta Gruyan, una jubilada que este año va a pasar seis meses en un camping de Villajoyosa porque "ahorramos mucho en luz".
Como ella, miles de jubilados europeos llenan los campings de la Comunidad Valenciana desde el pasado mes de octubre, son los conocidos como turistas energéticos. "Este año tenemos muchos turistas jubilados llegados especialmente de Holanda y Noruega, especialmente, por el tema energético. Con lo que les cuesta en su país la electricidad, pagan la estancia en un camping, con la luz incluída", afirma Jaime Cardona, responsable del Camping Playa Paraíso de Villajoyosa (Alicante).
MÁS
El precio medio de la estancia en un camping ronda en invierno los 400 euros al mes, a lo que hay que sumar unos 60 euros más de electricidad. Una cantidad que en muchos casos es inferior a lo que pagarían solo por la energía en sus países. "Hay meses que se puede llegar a pagar 1.000 euros al mes en Noruega, es demasiado para un jubilado", señala Kenut, que va a pasar en esta cámping alicantino desde octubre hasta abril.

Turismo inflacionista
Más al norte de la Comunidad Valenciana, en Benicàssim (Castellón), el camping Bonterra tiene un 95% de ocupación, unas 600 personas, la mayoría de ellas jubilados europeos. "Aquí hemos detectado una oleada de alemanes, que han llegado después de que su gobierno animara a los ciudadanos a salir del país para ahorrar en la factura energética", explica Cristophe Delaitre, gerente del establecimiento y presidente de los Campings de Castellón.
Uno de ellos es Joaquim, llegado de Colonia (Alemania), con su mujer. "Nos íbamos a venir en enero, después de Navidad, pero al final mi mujer y yo llegamos en noviembre y estaremos hasta a abril para ahorrarnos el coste de la energía", señala este jubilado, que explica que "aquí gastamos una botella de gas butano, que cuesta 23 euros, cada diez días, y de electricidad solo pagamos 15 euros al mes porque tenemos placas solares en la autocaravana. Son tres veces menos de lo que gastaríamos en nuestro país".
La mayoría de los llegados a los campings de la Comunidad Valenciana repiten, pero a ellos se unen otros que han venido por primera vez por lo costes energéticos. "Son turistas que están descubriendo que tenemos casitas de madera y bungalows con calefacción, donde además de ahorrar, les ofrecemos un servicio completo y los tenemos muy cuidados", señala Cristophe.
Al ahorro en luz y gas, se suma lo que economizan en el día a día. "Es lo que llamamos turismo inflacionista. Por ejemplo la comida es más barata y vivir aquí en general es más económico para ellos", asegura el gerente del cámping Bonterra.