Valencia reinventa los abanicos a través de la exposición “Diseñar el aire”

Más de 20 diseñadores de diferentes partes del mundo han participado en el proyecto
La exposición forma parte de las actividades de la Valencia Capital del Diseño 2022
Se podrá visitar en el Museo Nacional de Cerámica y Artes Santuarias González Martí hasta el tres de julio
Como parte de las actividades organizadas en el marco de la Valencia Capital del Diseño 2022, la ciudad del Turia ha inaugurado esta semana la exposición “Diseñar el aire”. Una muestra que pretende rendir homenaje a este objeto a través de la mirada de una veintena de diseñadores llegados de diferentes partes del mundo.
La exposición busca “actualizar” el abanico más tradicional a través de la fusión del diseño contemporáneo y la artesanía. Según el comisario y editor de la exhibición, Vicent Martínez, “enseñar al público que hay vida para un nuevo abanico sin renunciar a las nuevas tecnologías ni a la creatividad”.
Un artesano y más de 20 diseñadores
Para ello, la muestra cuenta con la participación del artesano valenciano y profesional del mundo del abanico, Ángel Blay, quien regenta un taller en Aldaia, el último de Europa que trabaja el nácar para la creación de este objeto artesanal.
Junto a Blay trabajan una veintena de diseñadores de producto gráfico, llegados de diferentes puntos del planeta, como Japón, Reino Unido, Madrid, Barcelona o Valencia. Todos ellos capaces de reinterpretar el diseño del abanico como un producto de los más actual. Reflejando nuevas vidas para el abanico “de modo que sea posible recoger la tradición sin dejar de utilizar las tecnologías más recientes que permiten a la artesanía enriquecerse”, subraya Martínez.
La exhibición permanecerá en el Museo Nacional de Cerámica y Artes Santuarias González Martí hasta el próximo tres de julio.
Valencia, historia de la industria abaniquera
El sector de creación del abanico permanece en la memoria valenciana de los últimos tres siglos. La presencia de este objeto se hace incluso más patente durante los años 20 y 30, cuando su industria en esta localización adquirió en este sentido una gran dimensión y desarrollo.
De hecho, “Valencia fue exportadora dinámica y estuvo muy conectada con las corrientes contemporáneas europeas de aquel momento”, explica Vicent Martínez, comisario de esta exposición.
Más adelante, la llegada de una producción más económica de este objeto hizo que la industria artesanal de la región fuese decayendo y perdiese su importancia en el ámbito comercial del momento.
Por ello, esta exposición es una "oportunidad" de revitalizar el sector de la artesanía que “lamentablemente, se pierde”, comenta Martínez, contando además con la implicación en el proyecto del último maestro artesano en abanicos de nácar que queda en Europa, el valenciano Ángel Blay.