Boris Johnson promete que "nunca habrá fronteras entre las dos Irlandas"

Johnson asegura que habrá Brexit y se desploman los mercados
El primer ministro británico Boris Johnson va de cabeza al Brexit, con o sin acuerdo con la Unión Europea. Al menos es lo que se desprende tras la reunión telefónica mantenida este martes con su homólogo irlandés Leo Varadkar. El británico le aseguró que su administración "nunca" restablecerá controles físicos en la frontera con Irlanda tras el "Brexit", de acuerdo a un comunicado distribuido por el gobierno del Reino Unido.
El gobierno de Johnson se compromete a "no poner nunca controles físicos o infraestructuras físicas en la frontera" entre la provincia británica de Irlanda del Norte e Irlanda, incluso en el caso de salida sin acuerdo del Reino Unido de la Unión Europea el próximo 31 de octubre.
La Unión Europea considera que tras la salida del Reino Unido de la UE se tienen que establecer fronteras físicas y que esto no es negociable.
El "Backstop" entre Irlanda y el Reino Unido
El nuevo líder conservador insiste en que busca un acuerdo de salida con la UE pero sin la "red de seguridad" irlandesa (o "backstop"), un último recurso destinado precisamente a evitar el regreso a una frontera física en la isla de Irlanda, donde los 500 km que separan el Norte de la República irlandesa se convertirían en la única frontera terrestre entre la UE y el Reino Unido.
Este mecanismo consiste en crear un "territorio aduanero único", que comprenda a la UE y al Reino Unido, en el que no haya cuotas ni aranceles aduaneros para los bienes industriales y agrícolas.
Irlanda del Norte además se mantendría alineada con un número limitado de reglas del mercado único europeo, por ejemplo en lo que concierne a las normas sanitarias en los controles veterinarios.
Esta solución, no obstante, resulta intolerable para algunos promotores del "Brexit" y el aliado de los conservadores norirlandés en el Parlamento, el pequeño partido DUP, que consideran que esto pondría en peligro la integridad del Reino Unido y de su mercado.
Desplome en los mercados
La insistencia y aparente determinación del Premier británico tuvo su reflejo en los mercados que se desplomaron en todos los países de la Unión Europea. En el caso de España, el Ibex35 sufría la mayor caída del año con pérdidas del 2,5%. La libra sufrió también un retroceso por segundo día consecutivo, lo que le lleva a cerrar julio con su mayor desplome mensual desde octubre de 2016.
La moneda cotiza en 1,21 unidades frente al dólar, lo que supone una caída del 4% en un mes y del 2,4% desde que Johnson asumió el cargo. Frente al euro, la libra cotiza en su nivel más bajo desde 2017, hasta las 1,09 unidades, con una caída del 2,5% en apenas dos sesiones, con lo que se acerca cada vez más a la paridad. Los expertos creen que el valor de la libra esterlina, en caso de Brexit duro tendría que ser inferior al euro.