El primer envío de misiles rusos a Turquía pone en alerta a la OTAN

Turquía recibe los primeros misiles antiaéreos S-400 rusos
Estados Unidos había amenazado con sanciones por la compra
Washington cree que los sistemas rusos son incompatibles con los de la OTAN
Pulso de Turquía a la OTAN. El Ministerio de Defensa de ese país ha anunciado que su Ejército ha comenzado a recibir los primeros misiles antiáreos S-400 comprados a Rusia. Pese a las advertencias de Estados Unidos y la amenaza de sanciones, la compra se ha consumado. Los equipos de defensa con misiles tierra-aire S-400 han comenzado a llegar a un aeropuerto militar de Ankara.
"Pedimos a la parte estadounidense que no tome medidas perjudiciales que eliminen el diálogo y dañen nuestras relaciones", ha dicho el Ministerio de Relaciones Exteriores de Turquía a través de un comunicado.
Amenaza de sanciones
Estados Unidos había advertido reiteradamente a Ankara su malestar por la compra de armamento ruso (adquirido por 2.500 millones de dólares). "Se expondría a consecuencias reales y perjudiciales si aceptara los misiles S-400", había asegurado la portavoz del Departamento de Estado, Morgan Ortagus. El secretario de Estado, Mike Pompeo, también se había referido a "terribles consecuencias".
Washington cree que los sistemas rusos no son compatibles con la red de defensa de la OTAN, de la que Turquía es miembro. Y considera también que existe el riesgo de que los operadores rusos que entrenan al Ejército turco en el S-400 puedan acceder a los secretos tecnológicos de los aviones de combate estadounidenses F-35, que Turquía también quiere comprar. Ahora esa venta podría ser cancelada.
En los últimos días, funcionarios estadounidenses habían lanzado un ultimátum a Ankara para que eligiera entre el sistema de defensa ruso y los F-35 de Estados Unidos. El Congreso de ese país se opone a que Turquía tenga los dos sistemas.
Sintonía entre Trump y Erdogan
Pese a las tensiones, el presidente estadounidense ha mostrado buena sintonía con el turco. Durante el encuentro del G20 en Japón, Erdogan aseguró que había intentado comprar el sistema de defensa antimisiles estadounidense Patriot , pero que la operación no se llevó a cabo porque no recibió buenas condiciones para la compra.

Trump culpó, entonces, al gobierno del ex presidente Barack Obama por no haber ayudado a Turquía a adquirir una alternativa estadounidense al sistema ruso. "Erdogan no tuvo la culpa", aseguró". Tras esa reunión a finales de junio en Osaka, el mandatario turco aseguró, confiado, que no creía que Estados Unidos llegase a sancionar a Turquía.