Egipto reabre la pirámide Acodada de Seneferu medio siglo después de cerrar para rehabilitarla

La extraña pirámide, levantada en Dahshur, a 40 kilómetros de El Cairo, es única en el mundo
Se considera un intento arquitectónico fallido, previa a las perfectas pirámides egipcias posteriores
El gobierno egipcio la reabre para impulsar su maltrecho turismo, de capa caída desde el derrocamiento de Mubarak en 2011
Egipto tiene desde ahora dos nuevos tesoros: dos pirámides que ha abierto al público tras más de medio siglo cerradas. Son dos construcciones levantadas hace 4.600 años. Se trata de la Pirámide Acodada y su satélite (mucho más pequeño). Ambas se encuentran en la localidad de Dahshur, a unos 40 kilómetros de El Cairo, y las dos fueron cerradas a los turistas hace más de medio siglo para renovar sus estructuras, en muy mal estado.
Una vez restauradas, el Gobierno egipcio ha decidido reabrirlas para atraer a nuevos visitantes e impulsar su debilitado sector turístico, de capa caída desde la rebelión de 2011 que acabó con el derrocamiento de Hosni Mubarak.

La Pirámide Acodada, única en el mundo
- No tiene sus caras lisas. Se considera un intento arquitectónico fallido, la fase previa a las perfectas pirámides egipcias posteriores.
- Posee dos entradas (en la cara oeste y norte), algo excepcional.
- Utiliza un sistema de cierre de grada (por primera vez en la historia)
- Está dotada de dos estructuras internas. La mitad inferior es lisa y muy inclinada. La superior, mucho más accesible y rugosa.
- Es la única pirámide de la antigüedad que conserva parte de su recubrimiento exterior, lo que le permite ser conocida como Aquella que brilla al sol.
- Y por si fuera poco, cuenta en su interior con una bóveda apoyada sobre cuatro paredes que es la más antigua nunca antes conocida.

Tanto la Pirámide Acodada, de 101 metros de altura, como su pequeña gemela, de unos 26 metros, se encuentran en la necrópolis de Menfis, declarada Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO. Fueron construidas para el faraón Seneferu, fundador de la cuarta dinastía egipcia. Hasta ahora sólo conocíamos su aspecto exterior, pero esta decisión gubernamental nos permitirá descubrir los secretos que esconde su interior. Como el angosto túnel de 79 metros que los turistas podrán recorrer para acceder al corazón de la gran pirámide Acodada o el extraño muro de 60 metros de largo, recién descubierto, situado al sur de las pirámides y que fue levantado por Amenemhat II.

Además, claro, de los tesoros hallados allí mismo este último año. Sarcófagos en piedra, arcilla y madera, momias en perfecto estado, decenas de máscaras funerarias y de herramientas para tallar la piedra que datan de la Baja época del antiguo Egipto (664-332 antes de Cristo).
Nuevas maravillas con las que se intenta convencer a los turistas para que vuelvan a viajar a Egipto. El Gobierno, de hecho, tiene un plan para recuperar nueve millones de visitantes en tres años.