Se reactiva la investigación sobre las actividades comerciales del hijo de Joe Biden

Hunter Biden vuelve a verse en las portadas de los principales medios estos días. Aunque no ha sido acusado de ningún delito, la investigación federal de la que es objeto por su trabajo en la compañía ucraniana de gas natural Burisma Holdings Ltd., mientras su padre era vicepresidente con Obama, se ha visto impulsada por la información que los fiscales están obteniendo sobre sus fuentes de ingresos en el extranjero. 

Nuevos testimonios han espoleado una investigación que lleva en curso desde 2018, con el objetivo de dictaminar si Hunter Biden incurrió en delitos como lavado de dinero, impago de impuestos y conflicto de intereses. Especialmente mientras fue parte de la junta directiva de la compañía ucraniana, entre 2014 y 2019, fechas que coinciden, en parte, con la época en la que su padre fue vicepresidente (2009-2017).

Así lo creen también los expertos en política ucraniana consultados por Politifact, la organización miembro de la Red Internacional de Verificación (IFCN) de la que forma parte la sección EFE Verifica (perteneciente a la agencia de noticias española), quienes declararon que el hecho de que Hunter decidiera aceptar el puesto de director de Burisma, mientras su padre era vicepresidente de la administración de Obama, ya presentaba un “grave conflicto de intereses”. 

Sin embargo, la investigación realizada por un grupo de senadores republicanos tras las acusaciones realizadas por Donald Trump, sobre posibles delitos de corrupción en los que podría haber incurrido el hijo del actual presidente, no ha encontrado pruebas de dichas irregularidades.

En 2019, el entonces presidente Trump inició una campaña de presión al mandatario ucraniano, Volodimir  Zelensky, para que investigara tanto a Hunter como a Joe Biden, en relación al trabajo que el primero estaba desempeñando para la compañía de gas de ese país y por las consecuencias que ello podría tener para su padre. También Rudy Giulani, el abogado personal de Trump, desveló en 2020 tener el disco duro de un ordenador personal que Hunter Biden había dejado en una empresa de reparaciones y que nunca recogió. 

Dicho portátil fue finalmente entregado al FBI para que investigara con garantías su contenido pero parte de este se difundió a los medios, especialmente aquel que resultó ser más nocivo para su dueño porque mostraba consumo de drogas y otros comportamientos comprometedores. Finalmente, el fiscal general William Barr ordenó que el material fuera entregado a las autoridades para que fuera investigado tanto por las agencias de inteligencia como por los fiscales.

Recientemente, el exmandatario Trump ha realizado acusaciones verbales sobre las actividades comerciales de Hunter Biden, llegando a decir que este recibió millones de dólares de la esposa del ya fallecido alcalde de Moscú, Yury Luzhkov. Por ello, según informaciones de la web especializada Politico, solicita a Putin que revele la información que posee sobre el hijo del actual presidente estadounidense.

En estos momentos, las investigaciones se han intensificado por parte del FBI, la fiscalía de Delaware y el departamento de Justicia de Washington. Los trabajos se están centrando en si la empresa de lobby y relaciones públicas que trabaja con Burisma, Blue Star, intentó influir en los funcionarios del gobierno de Estados Unidos, algo que fue desmentido por Joe Biden, quien ya dijo que el trabajo de su hijo en Ucrania no tuvo repercusión en ningún momento en las decisiones que él tomó en esa época.

El presidente también aseguró que él no interferiría en el trabajo del Departamento de Justicia y ha mantenido en su cargo al fiscal general David Weiss, que fue nombrado por Donald Trump durante su mandato para supervisar la investigación iniciada en Delaware.

La Casa Blanca también ha criticado la solicitud de Trump animando al mandatario ruso a dar información sobre Hunter Biden. “¿Qué tipo de estadounidense, y mucho menos un expresidente, piensa que este como el momento adecuado para entrar en un plan con Vladimir Putin y presumir de sus conexiones con él?”, dijo recientemente la responsable de Comunicación, Kate Bedingfield.

Hasta este momento, la administración Biden había evitado responder a las preguntas relativas a Hunter Biden, bajo la premisa de que este en ningún momento ha trabajado para el gobierno.