China pone vallas en entradas de apartamentos de Shanghái para hacer respetar el confinamiento


El Gobierno ha impuesto duras restricciones en la ciudad de 26 millones de habitantes
Pekín aplica su política de tolerancia cero contra la covid-19
El plan divide el cierre en dos fases durante 10 días
La ciudad china de Shanghái, de 26 millones de habitantes, vive un duro confinamiento impuesto hace cinco días para tratar de frenar el repunte de contagios de coronavirus. Para controlar las duras restricciones, con su política de tolerancia cero contra la covid-19, las autoridades chinas han optado por medidas drásticas: vallar las entradas de bloques de viviendas. Kilómetros de vallas han sido colocadas en tiempo récord.
El pasado domingo se declaró un cierre escalonado de diez días que se llevaría a cabo en dos fases. En primer lugar, se impuso el confinamiento en la zona oriental de la urbe, al este del río Huangpuen. Ese confinamiento debía matenerse de lunes a viernes.
A partir de este viernes, el cierre afecta a la otra orilla del río que divide ciudad. Se mantendrá hasta el cinco de abril. Pero además, las autoridades han decidido prorrogar las medidas en la zona oriental. Allí, una persona que viva en un edificio en el que haya un positivo, deberá permanecer en cuarentena otros 10 días.
Más de dos años después del inicio de la pandemia, estas medidas hacen mella entre los habitantes. "¡Déjennos salir!", clamaban en un vídeo difundido en las redes sociales los vecinos de un complejo residencial en esa ciudad china.
Protest against lockdown in Shanghai. "We want to eat. We want to go to work. We have the right to know!"#chinalockdown #lockdown #Shanghai pic.twitter.com/I9DARcC06V
— Eitan Waxman (@EitanWaxman) 27 de marzo de 2022
Todos los residentes deberán permanecer en sus hogares durante el período indicado por las autoridades. Solo se les está permitido pedir comida a domicilio, pero los repartidores solo tienen permitido el acceso hasta la puerta de las urbanizaciones.