Francia se defiende de las críticas por el caos en la final de la Champions y culpa a los hinchas ingleses

El ministro del Interior francés denuncia "un fraude masivo de entradas falsas"
Controversia también por los altercados protagonizados por población local
El ultraderechista Éric Zemmour dice tras los incidentes que el departamento "Seine-Saint-Denis ya no es Francia desde hace tiempo"
No solo hubo un derrotado en la final de la Champions en la que el Real Madrid se consagró frente al Liverpool en el Olimpo del fútbol europeo con su decimocuarta Copa. Los incidentes que el sábado obligaron a retrasar el inicio del partido en el Stade de France de París por problemas de seguridad dejaron -esta vez fuera del campo de juego- otro perdedor: la organización de un evento con proyección mundial. ¿De quién es la responsabilidad? Las críticas se han sucedido este lunes en un país que celebra elecciones legislativas en junio. Los ministerios de Deportes e Interior abordan en una reunión lo ocurrido para "sacar lecciones" sobre ello.
Francia culpa a los hinchas ingleses del caos. Había "entre 30.000 y 40.000 personas" sin entradas o entradas falsificadas en los alrededores del estadio, ha asegurado la nueva ministra de Deportes francesa, Amélie Oudéa-Castéra, este lunes en RTL. Se mantiene así en la línea del informe difundido el domingo por la jefatura de policía de París. Según la ministra, se concentró allí "más del 45% de exceso de personal” para un estadio con 80.000 asientos. El ministro del Interior, Gérald Darmanin, denuncia "un fraude masivo, industrial, de entradas falsas".
La ministra Oudéa-Castéra ha explicado que a causa de las entradas falsificadas se bloquearon los accesos, lo que provocó una "concentración de gente en la explanada que generó mucha espera e intentos de forzar las puertas del estadio por parte de jóvenes de los barrios aledaños".
Según la ministra, este tumulto también fue provocado por la falta de personal de apoyo en el estadio y "el hacinamiento de las áreas de control". También ha responsabilizado al club del Liverpool . “El club Real Madrid supervisó la llegada de su afición con autobuses fletados, lo que contrasta con lo que hizo el Liverpool, que dejó a su afición en libertad”, ha afirmado. Según ella, el club inglés y la UEFA también se negaron a obligar a los aficionados con entrada "a tener uso exclusivo de una aplicación móvil. Creó este circuito de billetes de papel", informa Le Monde.
El Gobierno británico, por su parte, se ha mostrado "profundamente decepcionado por el tratamiento de los seguidores del Liverpool en París".
Antes y después del partido, hinchas de ambos equipos han denunciado robos y disturbios protagonizados grandes grupos locales en los alrededores del estadio.
It wasn’t “British” causing issues outside the ground. It was gangs of your citizens causing chaos. Doing what they could to get in the ground before the match and attacking/robbing people afterwards.pic.twitter.com/X2IiH9eEPg https://t.co/vk3jDzdnvb
— Daniel Nicolson (@danielnicolson) 29 de mayo de 2022
El ultraderechista Éric Zemmour ha señalado como culpable de los incidentes a la población local de Seine-Saint-Denis: "Veo las imágenes, veo a los que atacaron, golpearon, robaron...", ha dicho este lunes en Europe 1. Según él, "Saint-Denis no es París" y "Seine-Saint-Denis no es Francia desde hace mucho tiempo". "Todavía quedan islotes franceses pero, por lo demás, son los enclaves extranjeros los que votaron mayoritariamente por (el izquierdista) Jean-Luc Mélenchon", ha escrito Zemmour. Y ha concluido que "no tiene odio, sino tristeza al ver que la ciudad de los Reyes se convierte en un enclave extranjero".
En un principio, la final de la Champions iba a celebrarse en San Petersburgo, pero la invasión rusa de Ucrania modificó el guión. La UEFA anunció el pasado 25 de febrero -un día después del inicio de la guerra- que trasladaba esa cita al Stade de France en París.
Medios franceses se preguntan este lunes si la capacidad de Francia para organizar grandes eventos ha quedado en entredicho. En 2023, se celebra allí la Copa Mundial de Rugby y en 2024 tendrá lugar la gran cita de los Juegos Olímpicos de París. La ministra de Deportes ha respondido a las inquietudes: "Somos capaces de organizar grandes eventos deportivos, lo hemos demostrado desde la Eurocopa 2016. No estoy preocupada, estoy comprometida con que aprendamos todas las lecciones de lo que sucedió el sábado por la noche para aprender de eso".