Oliver Blume, CEO de Volkswagen y el hombre con el “trabajo más difícil de Alemania”


El consorcio alemán fabricante de coches Volkswagen, que emplea a unas 670.000 personas en todo el mundo, estrena nuevo CEO. Se trata de Oliver Blume.
Este directivo, que conserva su cargo a los mandos de la marca Porsche, está llamado a liderar al Grupo Volkswagen en tiempos de crisis.
Desde hace unos días Oliver Blume tiene, según lo ha calificado el diario económico Handelsblatt, “el trabajo más difícil de Alemania”. Ocupa el cargo de CEO del consorcio alemán fabricante de coches Volkswagen.
La semana pasada tomaba públicamente el relevo de Herbert Diess, un hombre que desde finales del año pasado parecía que tener los días contados al frente del consorcio. Diess se mantuvo en el puesto contra viento y marea hasta el pasado mes de julio, cuando trascendió la noticia de su cesión.
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Blume, de 54 años y una vida dedicada al Grupo Volkswagen – ha pasado por Audi, Volkswagen, Seat y Porche – llega con un perfil de hombre “simpático”, según recoge la crónica económica teutona de estos días. De su predecesor no se podía decir lo mismo.
Al menos muchos no lo veían como a Blume, del que se dice que ha generado “el espíritu optimista en la empresa que tantos esperaban”, según decían responsables de la empresa al Handelsblatt la semana pasada, concretamente el día de la gran presentación del CEO al gran público en el Museo Nacional de Coches de Lisboa.
“Diess puso en marcha una estrategia que permite a la empresa mirar hacia el futuro. Y lo más probable es que Blume continúe con esa estrategia”, explica a NIUS Ferdinand Dudenhöffer, profesor de la Universidad de Duisburgo-Essen y experto de referencia en la industria alemana del automóvil.
Welcome CEO Oliver Blume, thank you @Herbert_Diess!
— Volkswagen Group (@VWGroup) 1 de septiembre de 2022
"Teamwork, focus & implementation are my key priorities. Volkswagen is on the right course. The Board around Herbert Diess has done a good job strategically and technologically. Now we have to deliver.” – CEO Blume pic.twitter.com/lzX9ddNpMU
“Diess fue alguien que llevó a cabo un radical cambio de dirección, algo que fue importante, pero ahora lo que están tratando de hacer con Blume es avanzar en esa estrategia con alguien que busque menos la confrontación”, según este experto. En este sentido, el propio Blume dejaba dicho en julio que la empresa “viene de una fase de planificación estratégica, ahora queda hacer hincapié en implementarla”.
A Dudenhöffer no se le pasa que pese a las reformas puestas en marcha por Diess, autor entre otras cosas del gran empujón hacia la electrificación de los vehículos de Volkswagen, su gestión también ha estado marcada por los problemas de Cariad, la filial del consorcio alemán dedicada al desarrollo de software aplicado a la industria del automóvil. “Diess quería ver desarrolladas soluciones en este campo, pero no se han visto. Y esto ha provocado grandes retrasos en modelos de Porche y de Audi. Hay modelos que han terminado llegando tarde al mercado y algo así siempre hace daño a la empresa”, según Dudenhöffer.
Un “fan” de la movilidad eléctrica
De Blume, del que también se dice que es un gran “trabajador en equipo” y alguien que dará más libertad a los responsables de las marcas del consorcio, se espera que pueda resolver esos problemas detectados en Cariad.
Pese a esas dificultades en el capítulo del software, Blume llega al 'trono' de Volkswagen con una empresa que ha registrado un volumen de negocio de algo más de 132.000 millones de euros en la primera mitad de 2022, según ha recogido el Handelsblatt. El montante es muy superior al de los otros dos grandes fabricantes de coches alemanes, a saber, Mercedes (71.300 millones de euros) y BMW (65.900 millones de euros).
El periodista Simon Hage, reportero económico del semanario Der Spiegel, explica a NIUS el estado de la industria del automóvil
— NIUS (@NiusDiario) 13 de junio de 2022
✍🏼 Lo cuenta @SmmEnBerlin https://t.co/eDaawo9dj4
Cifras de esa magnitud no ocultan, por ejemplo, que la marca homónima del Grupo Volkswagen no atraviesa su mejor momento. Su modelo Golf, materialización durante años del éxito del consorcio, hace tiempo que dejó de ser el vehículo más vendido en Europa. En 2021 los consumidores del 'viejo continente' hicieron al Peugeot 208 el coche más vendido para regocijo del grupo automovilístico internacional Stellantis.
“Fan” declarado de la movilidad eléctrica, Blume ha llegado a la posición de CEO en Volkswagen sacando pecho en una de sus primeras entrevistas, concedida a la última edición del dominical Bild am Sonntag, de haber hecho a Porsche una firma “pionera” con el modelo Taycan. Ese modelo de Porsche, presentado en el mercado en 2019, es el primero 100% eléctrico de esa marca de coches de lujo.
CEO de Volkswagen y, todavía, presidente de Porsche
El balance de Blume en Porsche le ha valido la confianza de los principales accionistas del consorcio. A saber, fundamentalmente, las familias Porsche y Piëch, el Land de Baja Sajonia (oeste alemán).
El cargo de dirección de Porsche que aún ocupa no parece que Blume vaya a dejarlo pronto. “El trabajo de jefe en el grupo Volkswagen es el más excitante que puede haber en la industria del automóvil. El trabajo de jefe de Porche, el más guay que existe, lo mantengo”, decía Blume al Bild am Sonntag.
Mantener la presidencia de Porsche es algo que se explica en parte también por la decisión que han tomando en las altas instancias del consorcio de aprobar la salida a Bolsa de la empresa que fabrica coches de lujo. “El ocupar también la presidencia de Porsche seguramente sea para él una gran carga, pero es importante para el Grupo Volkswagen en esa salida a Bolsa. Creo que una vez tenga éxito con esa operación, Blume seguramente se concentrará en el Grupo Volkswagen”, plantea Dudenhöffer desde la Universidad de Duisburgo-Essen.
Un contexto de crisis para Blume
Por lo pronto, Blume no sólo va a tener que lidiar con la complicación de ocupar esas dos responsabilidades. Porque también le ha tocado tomar los mandos del Grupo Volkswagen en un momento de preocupante crisis económica internacional.
Inflación, precios energéticos por las nubes y un horizonte en el que se atisba la recesión económica plantean a Blume un recorrido nada fácil para conducir las docena de marcas de vehículos que integran el Grupo Volkswagen. “El contexto es complicado porque nos dirigimos en Europa hacia una recesión, a lo que se suma la inflación y los altos precios de la energía. Son tiempos complicados, sin duda”, dice Dudenhöffer.
“Pero parece que las familias Porsche y Piëch, los sindicatos y el Land de Baja Sajonia están convencidos de que con Blume y su disposición a trabajar en equipo se pueden resolver mejor los problemas de Volkswagen que con alguien como Diess, que quería ante todo cambiar radicalmente”, concluye Dudenhöffer.