El G7 se coordina para ayudar a Ucrania a pasar el invierno


Los ministros de Asuntos Exteriores del G7 se han reunido el jueves y este viernes en la ciudad alemana de Münster para, entre otras cosas, responder a las necesidades ucranianas de los próximos meses.
Zelenski asegura que 4,5 millones de ucranianos están sin electricidad tras los ataques rusos
Pese a los éxitos de la contraofensiva ucraniana en el este de su territorio, resulta improbable que la ilegal guerra de agresión que ha lanzado Rusia haya terminado este invierno. Esto es algo que saben en Kiev y una realidad a la que los países del G7, foro que integran las democracias más relevantes del planeta, van a tener que adaptarse.
Esa adaptación también pasa por coordinarse para ayudar al país de Volodimir Zelenski en los próximos y fríos meses del invierno. La reunión que mantenían en Münster (oeste alemán) el jueves y este viernes los ministros de Asuntos Exteriores del G7 servía precisamente para organizar ese apoyo.
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Desde que el Ejército ucraniano se lanzara en su actual y por el momento exitosa contraofensiva contra la fuerzas invasoras rusas, el régimen de Vladimir Putin ha optado por concentrar buena parte de sus ataques contra las infraestructuras civiles en todo el territorio de Ucrania. Resultado de esos ataques, que también han tenido por objetivo los centros de producción de electricidad ucranianos, hasta 4,5 millones de personas en Ucrania se han quedado sin electricidad.
“Con los ataques rusos a las infraestructuras civiles, Putin ha elegido una nueva vía en la guerra: generando hambre, sed y dejar que las personas se congelen”, señalaba en Münster la ministra alemana de Asuntos Exteriores, la política ecologista Annalena Baerbock. Según los cálculos de la jefa de la diplomacia germana, Ucrania ha perdido entre un 35% y un 40% de su suministro eléctrico como consecuencia de los últimos ataques rusos.
Dado que Alemania ocupa actualmente la presidencia del G7, Baerbock era la maestra de ceremonias en la reunión de ministros celebrada en Münster, en la que los jefes de la diplomacia de los países democráticos más desarrollados del planeta acordaban lanzar un mecanismo de ayuda coordinado para apoyar a los ucranianos este invierno frente frente a la agresión rusa.
#Frieden durch #Recht - dafür steht Münster seit dem Westfälischen Frieden. Und genau hierfür, für Frieden durch Recht, stehen wir auch als #G7. 1/2 pic.twitter.com/gX3vCZBZ9S
— Außenministerin Annalena Baerbock (@ABaerbock) 3 de noviembre de 2022
“Reparar, restaurar y defender” la energía e infraestructuras de Ucrania
La idea de Alemania, Francia, Italia, Reino Unido, Estados Unidos, Canadá y Japón es “reparar, restaurar y defender” la energía y las infraestructuras hídricas de Ucrania antes de la llegada del invierno, según se lee en el comunicado emitido este viernes por los ministros del G7. En esta línea de trabajo internacional abierta en Münster, el próximo 13 de diciembre París acogerá una conferencia internacional dedicada a la "resiliencia civil ucraniana". Ese evento lo organizarán conjuntamente Francia y Ucrania.
Alemania, según recogía esta semana el Frankfurter Allgemeine Zeitung, ya ha enviado a Ucrania 100 generadores de electricidad, junto a calefactores, mantas, camas, bombas de agua y casas móviles para responder a las necesidades de los ataques contra las infraestructuras civiles ucranianas.
“La Rusia de Putin está tratando de destruir Ucrania, no pueden ganar en el campo de batalla, no pueden ganar la guerra y están destruyendo el país de forma sistemática. Están bombardeando y destruyendo infraestructuras civiles. Millones de ucranianos ya no tienen acceso a electricidad”, explicaba en Münster Josep Borrell, el alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad.
What Putin is willing to do is to put Ukraine into darkness in the wintertime. This is a war crime. We have to and will continue supporting #Ukraine.
— European External Action Service - EEAS 🇪🇺 (@eu_eeas) 3 de noviembre de 2022
Doorstep by HRVP @JosepBorrellF at the @G7 Foreign Ministers Meetinghttps://t.co/LNTD2aqMHL pic.twitter.com/w7LhzOD2HN
“Putin quiere poner Ucrania a oscuras en invierno, es un crimen de guerra”
“Lo que Putin quiere hacer es poner a Ucrania a oscuras en invierno. Esto es un crimen de guerra”, abundaba Borrell. Ese era el más destacado de los “desafíos” a los que estaba dedicado el encuentro del G7 en Münster, según apuntaban antes de la cita en el Ministerio de Asuntos Exteriores de Alemania.
En el encuentro de Münster también participó por videoconferencia el ministro de Asuntos Exteriores ucraniano, Dimytro Kuleba. El jefe de la diplomacia ucraniana señalaba la importancia que ahora tienen para su país “transformadores de energía, defensa anti-aérea y misiles, tanques con los estándares de la OTAN, más armas para apoyar las ofensivas ucranianas, sanciones [contra Rusia, ndlr.] y que se rindan cuentas por la agresión contra Ucrania”, según Kuleba.
During my today’s address at the meeting of G7 Foreign Ministers I demonstrated them a part of an Iranian-made drone which has recently hit Kyiv. Iran must cease supplying Russia with weapons used to kill Ukrainians or face an even stiffer global pressure and consequences. pic.twitter.com/sdTCoAbWk4
— Dmytro Kuleba (@DmytroKuleba) 3 de noviembre de 2022
El propio ministros de Asuntos Exteriores del presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, presentaba en su videollamada restos de uno de los drones suicidas de fabricación iraní que está utilizando Rusia contra las infraestructuras ucranianas. “Irán debe cesar de proveer a Rusia con armas que se usan para matar a ucranianos o debe enfrentarse a consecuencias y una mayor presión global”, reivindicaba Kuleba.
Aliviar las consecuencias internacionales de la guerra
Consecuencias globales está teniendo desde hace tiempo la ilegal invasión que sufre Ucrania. Estos efectos también fueron abordados por Baerbock y compañía en Münster. Por eso los ministros de exteriores del G7 volvían a animar a los países productores de petróleo a “aumentar la producción”, algo que contribuiría a disminuir la “volatilidad de los mercados” energéticos.
“Mitigar las consecuencias de la guerra de agresión” de Rusia contra Ucrania va a seguir siendo una prioridad para Alemania, Francia, Italia, Reino Unido, Estados Unidos, Canadá y Japón, según apuntaban en el comunicado de emitido por sus ministros de Asuntos Exteriores este viernes. Por eso también volvían a condenar las últimas tentativas rusas de usar las exportaciones de comida como “arma de coerción geopolítica”.
“Desafíos geopolíticos” derivados de la invasión Rusia en Ucrania en Asia Central también fueron abordados en Münster. Con esa parte del mundo los ministros del G7 decían este viernes estar comprometidos para fortalecer su “cooperación” con “gobiernos y gentes” en pro del “desarrollo socioeconómico”, “el respeto de los derechos humanos”, “la puesta en marcha de reformas internas e institucionales” y la “seguridad regional”.
Este interés del G7 no es casual, a sabiendas del debilitamiento ruso en lo que otrora fueron repúblicas soviéticas como consecuencia de la guerra en Ucrania. Pero esto tampoco fue lo más comentado de una cita diplomática en la que asuntos como el papel internacional de China, Irán y Corea del Norte también ocuparon a Baerbock y compañía. En realidad, la guerra rusa contra Ucrania y sus consecuencias, especialmente de cara a este invierno, es lo que más preocupa en el G7.