Scholz pide a los alemanes "confianza" ante la decisión "inevitable" de enviar Leopard a Ucrania


Pese a la infinidad críticas que Olaf Scholz ha tenido que asumir, en su país y fuera de él, el canciller alemán quiere marcar los ritmos en lo que respecta al envío de los Leopards hacia Ucrania.
En política, los tiempos del canciller Olaf Scholz tienen algo de indescifrable. No es ésta una novedad del jefe del Gobierno alemán. Su predecesora, la canciller Angela Merkel, también fue criticada en su momento por tomarse su tiempo, en exceso, a la hora de tomar decisiones ante la crisis como la del euro o la de los refugiados de 2015.
La crisis geopolítica que ha generado la ilegal guerra de Rusia contra Ucrania ha dado lugar a infinidad de críticas contra Alemania, sobre todo, por la lentitud con la que decidió Berlín el envío de material de guerra pesado con destino a Ucrania. Esas críticas han sido algo que ha acompañado al canciller Scholz desde que comenzó la invasión por tierra, mar y aire de Vladimir Putin contra el país de Volodímir Zelenski.
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Con los Leopard, los tanques de fabricación germana que Scholz confirmaba este miércoles que pronto irían con destino Ucrania, ha pasado lo mismo que con Merkel en su momento. Scholz ha impuesto sus tiempos y le han dado igual muchas de las preguntas que generaban sus anuncios de este miércoles en el Bundestag.
"Wir werden der Ukraine auch #Kampfpanzer zur Verfügung stellen vom Typ #Leopard2", so der @Bundeskanzler. Allen, die jetzt eine Eskalation fürchten, sagt #Scholz: "Vertrauen Sie mir, vertrauen Sie der Bundesregierung." Man werde weiter international abgestimmt handeln. pic.twitter.com/56Yaw00OdQ
— SPD-Fraktion im Bundestag (@spdbt) 25 de enero de 2023
Por ejemplo, si Alemania ha estado tan centrada en actuar con sus socios “de forma coordinada”, tal y como defendía Scholz en el Bundestag: ¿Por qué haber hecho el anuncio sobre los Leopard este miércoles en lugar de hace unos días, en la última reunión del Grupo de Contacto de Defensa de Ucrania en la base militar estadounidense de Ramstein? ¿Por qué haber obviado para hacer ese anuncio la reunión de los 60 años del Tratado del Elíseo del pasado domingo? O, ¿Por qué haber esperado a que Polonia realizara la petición formal de re-exportar los Leopards el martes?
Probablemente, porque Scholz aún no estaba seguro de que otros países occidentales, especialmente Estados Unidos, fueran a realizar anuncios como el suyo de este miércoles. Eso sí, la agencia estadounidense Bloomberg, por ejemplo, ya presentaba este miércoles como un hecho que la administración del presidente Joe Biden iba a anunciar en esta jornada el envío a Ucrania de tanques modelo Abrams. Decía Scholz en el Bundestag que el objetivo de Alemania y de los socios europeos y de la OTAN es formar “dos batallones de tanques”. En esos batallones habrá Leopard 2 A6 alemanes, otros tanques de fabricación germana de aliados de Berlín y se supone que habrá que sumar los británicos Challenger 2 prometidos por Londres y los que tengan que llegar de la parte de Estados Unidos.
Scholz y la necesaria “unión de Occidente contra Rusia”
En suma, Scholz ha esperado a que haya “unidad en Occidente”, algo que celebraba en su análisis el comentarista del diario berlinés Der Tagesspiegel Malte Lehming. “La unidad de Occidente es el arma más poderosa en la lucha contra Putin. Es evidente que el canciller alemán – a diferencia de algunos de sus críticos – lo ha entendido”, escribía Lehming este miércoles. Por eso se ha, según su términos, “forjado una 'gran coalición' de proveedores de tanques” occidentales. En su periódico los había que veían “un momento histórico” en el que “se despeja el camino para un esfuerzo conjunto europeo” en materia de Defensa, según otro editorialista, Christoph von Marschall.
Para Lehming, lograr los resultados presentados este miércoles por Scholz exigía pasar por la para muchos interminable fase de cábalas militares en Berlín a cuenta de los Leopards.
Scholz, por su parte, no entiende de prisas. Por eso defendía con calma este miércoles su gestión y su forma de proceder en la sesión de control en el Bundestag. De hecho, presentaba también su "actuación en coordinación" internacional como la mejor herramienta contra un estado de opinión marcado por la división sobre la conveniencia de mandar a suelo ucraniano los Leopards, entiéndase los de Alemania y los de la docena de países que operan esos carros de combate.
Esas naciones dependen de la luz verde de Berlín para ser re-exportados. Scholz ya ha dicho que dejará su re-exportación al país ilegalmente invadido por Rusia.
Scholz en el Bundestag: “confíen en mí y confíen en el Gobierno”
El caso es que el canciller quiere tranquilizar a quienes creen que Occidente está corriendo riesgos con su apoyo a Ucrania. “Hay en este país muchos ciudadanos que se preocupan por una decisión así y por la dimensión que estas armas traen consigo. Y quiero decirles desde aquí: confíen en mí y confíen en el Gobierno”, decía Scholz en el Bundestag, aludiendo a los Leopard. “Vamos a asegurar, porque estamos negociando internacionalmente, que este apoyo [a Ucrania, ndlr.] es posible sin que los riesgos para nuestro país crezcan en la dirección equivocada ”, señalaba Scholz. “Vamos a hacer todo lo posible y necesario para ayudar a Ucrania y al mismo tiempo evitar la escalada de la guerra y una guerra entre Rusia y la OTAN”, abundaba el canciller.
Si bien esas palabras pueden ahora tener un efecto en la opinión pública, la decisión de Scholz sobre los Leopard, para Rusia, constituye algo “extremadamente peligroso”, según citaban en el diario Frankfurter Allgemeine Zeitung al embajador ruso en Berlín, Sergei Netschajev. En un comunicado emitido por la Embajada de Rusia en Alemana, Netschajev señalaba: “Una vez más nos convencemos de que Alemania, al igual que sus aliados más cercanos, no está interesada en una solución diplomática a la crisis ucraniana”.
⚡ Kommentar des Botschafters Netschajew zur Entscheidung der Bundesregierung, Leopard-2-Panzer an die Ukraine zu liefern
— Botschaft der Russischen Föderation (@RusBotschaft) 25 de enero de 2023
"Ein weiteres Mal überzeugen wir uns, dass 🇩🇪 nicht an einer diplomatischen Lösung der 🇺🇦 Krise interessiert ist."
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Habla el embajador ruso de que Alemania y compañía en Occidente “quieren escalar la guerra”, pero ni en su embajada ni en el Kremlin se hacen referencias claras a represalias.
Así, Dimitri Peskov, el portavoz del presidente Vladimir Putin, señalaba que la decisión de liberar a los Leopards con destino a Ucrania traerá consecuencias para la relación germano-rusa. “Las relaciones han llegado a un punto muy bajo. Sin duda las posibles entregas de tanques Leopard a Ucrania no auguran nada bueno y afectarán inevitablemente al futuro de las relaciones germano-rusas”, según Peskov.
Mandar tanques occidentales a Ucrania, “inevitable”
A estas alturas parece estar claro que el envío de tanques occidentales no era la “línea roja” infranqueable que muchos opositores a enviar esta ayuda decían que era. Ahora bien, Scholz ha tenido que tomarse su tiempo para que esto se vea así.
O, visto de otro modo, ha tenido que llegar el momento en que Scholz ha sido obligado a violentar sus tiempos. Para Marcel Dirsus, experto del Instituto para la Seguridad de la Universidad de Kiel, la presión a la que ha estado sometido el Gobierno alemán hacía de la situación de Scholz algo “insostenible”. “Mandar tanques occidentales es inevitable. No se puede evitar que ocurra”, según este experto. “El problema para el canciller es que cada vez que se compromete a algo, cada vez que dice que da un paso, se está comprometiendo también a cumplir. Y eso le añade todavía más presión”, concluye.