Alemania prolonga el “confinamiento light” y Merkel pide a la población “hacer otro esfuerzo”


La canciller alemana impone su criterio esta vez en su reunión de este miércoles con los presidentes de los 16 Länder
Prolonga el “confinamiento light” hasta bien entrado diciembre, pese a que en un principio duraba hasta el último día de noviembre
En el momento de instalar a principios de este mes el “confinamiento light”, en Alemania parecía que había que “salvar la Navidad”. Pero, por ahora, Alemania tiene que seguir haciendo esfuerzos para frenar al coronavirus.
La incidencia de la COVID-19 en el país de la canciller Angela Merkel sigue muy lejos de los 50 nuevos casos positivos por cada 100.000 habitantes en la última semana. Esa es la incidencia que Merkel y los presidentes regionales germanos quieren alcanzar. Pero, de momento, sus esfuerzos resultan insuficientes.
Según Merkel, las infecciones diarias en Alemania se encuentran en una “meseta” de valores demasiado altos.
Según las cuentas del Instituto Robert Koch (RKI), la agencia federal de prevención y control de enfermedades, la actual incidencia en Alemania es 139,6 nuevas infecciones por cada 100.000 habitantes en la última semana. De ahí la necesidad de endurecer las medidas contra la propagación del coronavirus que presentaba Merkel este miércoles tras reunirse por videoconferencia con los 16 presidentes de los Länder germanos.
De ahí que el “confinamiento light”, previsto inicialmente sólo para el mes de noviembre, se haya alargado hasta bien entrado diciembre, concretamente hasta el día 20 del próximo mes. Ello implica que se mantengan cerrados bares, restaurantes y demás locales de la industria del tiempo libre, como teatros o cines.
“Necesitamos hacer otro esfuerzo. Nuestra paciencia, disciplina y solidaridad van a someterse otra vez a una dura prueba”, decía la canciller este miércoles.
“La situación no nos permite levantar las medidas de noviembre”
“La situación no nos permite levantar las medidas de noviembre”, añadía la jefa del Gobierno germano en la conferencia de prensa posterior a la reunión con los líderes de los Länder.
Entre las medidas adicionales a considerar a partir de ahora en Alemania figura que sólo se podrán reunir cinco personas de dos hogares distintos. En las escuelas, según lo acordado por Merkel y compañía, se intensificará el uso de las mascarillas, haciéndolo obligatorio también en clase a partir de la séptima clase – el equivalente en España a 1º de la ESO.
Para los comerciantes también habrá restricciones. El espacio de las tiendas estará limitado. A saber, se limitará a un cliente por cada veinte metros cuadrados en negocios con más de 801 metros cuadrados. En los locales más pequeños, se podrá dar espacio a un cliente por cada 10 metros cuadrados.
Este miércoles, Merkel y compañía iban algo más lejos de lo que lo hacían la semana pasada. Entonces básicamente pidieron a la población reducir aún más los contactos sociales. Además, anunciaron, entre otras cosas, medidas para proteger a los grupos de riesgo como el facilitar a los integrantes de esos grupos de 15 mascarillas FFP2 – barreras de alto rendimiento frente a los virus – que recibirán en diciembre.
El nuevo calendario de las restricciones alemanas contra el coronavirus contará con una pequeña tregua, entre el 23 de diciembre y el 1 de enero. En ese periodo habrá un leve relajamiento de las restricciones del contacto social más estrictas.
El número de nuevos contagios en Alemania apenas han bajado en noviembre. Cierto es que el número de nuevos infectados no crece de modo exponencial. Pero las medidas de “confinamiento light” parece han haber surtido efecto sólo en parte.
Merkel hablaba este miércoles de que su país ha logrado con el “confinamiento light” un “éxito parcial”. Entre otras cosas, porque los nuevos contagios se mantienen en un nivel elevado.
Camino del millón de infectados desde que comenzó la pandemia
Según el RKI, este miércoles se registraban en las últimas 24 horas 18.633 nuevos casos de COVID-19. La media diaria en los últimos siete días estaba en 18.858 este miércoles. Esta semana se preveía que el país alcance el millón de infectados desde que comenzó la pandemia.
En total, este miércoles se contaban 14.771 muertos en Alemania por culpa de la COVID-19 desde que empezó a detectarse el coronavirus en suelo alemán. En las últimas 24 horas, murieron 410 personas, según las cuenta del RKI. Es el máximo número de fallecimientos registrados en Alemania durante la pandemia.
Dando el actual nivel de contagios, preocupa desde hace semanas la creciente ocupación de las unidades de cuidados intensivos de los hospitales del país. Este alza es otra prueba de que la segunda ola de contagios está golpeando al país como no lo hizo la primera.
Más ayudas para las empresas afectadas y más deuda para el Ejecutivo
Está por ver cómo afectará a la curva alemana del coronavirus las medidas presentadas este miércoles. De lo que no cabe duda es de que el ministro de Finanzas, el socialdemócrata y también vicecanciller Olaf Scholz, tendrá que seguir facilitando dinero público a los negocios que tengan que seguir cerrados por las medidas anti-COVID-19.
Sólo para el mes de diciembre, según ha trascendido en los medios de comunicación, el Gobierno alemán prepara 17.000 millones de euros para las empresas afectadas. La idea es que esas firmas reciban el 75% de lo que ganaron en diciembre del año pasado. Una medida idéntica ya se implementó para el mes de noviembre.
En total, se estima que el Gobierno alemán se ha endeudado por valor de 218.000 millones de euros en 2020 por culpa de la pandemia, según las cuentas que presentaba a principios de esta semana el diario económico Handelsblatt. Para 2021, de acuerdo con ese periódico, Olaf Scholz y compañía quieren endeudarse por valor de otros 160.000 millones de euros.