Boda en el frente: dos soldados ucranianos se casan en las trincheras de Kiev


Sigue la última hora de la invasión rusa de Ucrania en NIUS
Lesya y Valeryi habían fijado su fecha de boda antes de la guerra
Vestidos con ropa militar -son de la Fuerza Aérea- celebraron con sus compañeros su enlace
La guerra de Ucrania ha trastocado la vida de millones de personas, pero Lesya Ivashchenko y Valeriy Fylymonov no han dejado que la invasión rusa les estropee sus planes. La pareja de militares ucranianos tenían previsto casarse el 6 de marzo y lo han hecho- a pesar de Putin-.
Lesya y Valeriy pertenecen a las Fuerzas Aéreas de Ucrania y se han dado el "si quiero" en pleno frente de batalla. En un checkpoint cerca de Kiev, la capital asolada por las bombas. Ellos y sus compañeros han dejado las armas apostadas cerca de ellos para celebrar la boda.
Vestida de uniforme de camuflaje y el velo bajo el casco, Lesya, la novia llegaba al improvisado altar del brazo de un compañero. Allí la esperaba su prometido, el comandante Valeriy, también de caqui y con casco.
Un sacerdote ortodoxo, con la casulla sobre el chaleco antibalas les ha unido en matrimonio. En los fusiles y metralletas de sus compañeros de batallón, rosas blancas.
A pesar de estar en una trinchera y con los ecos de las bombas a pocos kilómetros, los novios brindaron con champán y una lluvia de pétalos cayó sobre la novia cuando les declararon "marido y mujer".
La pareja llevan juntos media vida y tienen una hija de 18 años en común. Habían decidido casarse antes de la invasión y lo han hecho pese a la guerra.
This couple, Lesya and Valeriy, just got married next to the frontline in Kyiv. They are with the territorial defense. pic.twitter.com/S6Z8mGpxx9
— Paul Ronzheimer (@ronzheimer) March 6, 2022
Tampoco ha faltado el ágape. Canapés y tarta para todos. También música. Un compañero ha entonado una típica canción ucraniana, mientras Lesya no podía contener las lágrimas. "No había imaginado mi bodas así", asegura a los periodistas, mientras Valeriy mira serio y la coge de la mano.
En breve sonarán las sirenas de nuevo. Las bombas volverán a caer. La pareja de soldados y su batallón volverán a empuñar sus metralletas y fusiles. En los dedos de Lesya y Valeriy lucen ahora unas alianzas.