"Churchill era un racista": los británicos la toman con las estatuas de sus figuras históricas

Varios protestantes escribieron mensajes reivindicativos sobre las estatuas de Winston Churchill, Gandhi y el esclavista Edward Colson
La manifestación en Londres del pasado sábado acabó con 14 personas detenidas y más de 10 policías heridos
Los protestas para condenar la brutalidad policial y el racismo se suceden a lo largo del mundo. En Londres, miles de manifestantes se reunieron en el exterior de la Embajada de EE.UU. para condenar la actuación policial después del asesinato de George Floyd en Mineápolis.
Además, los británicos la han tomado con distintas estatuas de sus antepasados. Sobre el memorial del ex primer ministro británico Winston Churchill, los protestantes londinenses escribieron el mensaje "Era un racista" mientras coreaban "sin justicia no hay paz". Además, colgaron carteles sobre la estatua con el que se ha convertido en el lema de las protestas contra el racismo: 'Las vidas negras importan'.
Actos también en la estatua de Gandhi, situada también en la Plaza del Parlamento de la capital británica. Uno de los manifestantes colocó una pancarta en la que se podía leer "Reino Unido no es inocente".
Por otro lado, durante la protesta de este domingo en Bristol (Reino Unido), en la que participaron unas 10.000 personas, se derribó una estatua del comerciante de esclavos del siglo XVII Edward Colston. El acto se produjo durante las manifestaciones celebradas alrededor del país.
Los manifestantes bajaron la estatua de bronce, erigida en 1895, con una cuerda antes de saltar sobre la figura caída. Después, hicieron rodar la estatua por las calles de Bristol hasta arrojarla al río de la ciudad.

La compañía de Colston transportó a más de 100.000 esclavos de África occidental al Caribe y a América entre 1672 y 1689 en barcos para maximizar las ganancias. El comerciante dio grandes sumas de dinero a Bristol a costa de sus negocios de comercio y explotación de esclavos.
La figura ya había sido objeto de polémica y motivó una petición ciudadana para que fuera retirada. "Tener estatuas de personas que nos oprimieron no es algo bueno para decirle a los negros en esta ciudad", afirmó el parlamentario de Bristol West, Thangam Debbonair.
Derribada la estatua de un general confederado en Estados Unidos
Por otro lado, durante la manifestación contra el racismo en Richmond, Virginia, ha sido derribada la estatua del general confederado Williams Carter Wickham. Los manifestantes, concentrados en el parque Monroe, derribaron la estatua en la noche del sábado.
Wickham era abogado, dueño de una plantación, político y general de caballería de la Confederación durante la guerra civil americana (1861-1865). La estatua data de 1891.
En ese mismo parque -utilizado como hospital de campaña durante la guerra- hay otras dos estatuas dedicadas a personalidades confederadas, una de ellas a Fitzhugh Lee, general confederado y sobrino del mítico Robert E. Lee. El gobernador de Virginia, Ralph Northam, había ordenado el jueves la retirada de una estatua de Robert E.
En la misma línea, el viernes, el Cuerpo de Marines de las Fuerzas Armadas estadounidenses anunció la retirada de todas las banderas confederadas. "Los acontecimientos actuales son un terco recordatorio de que no basta retirar los símbolos que provocan división, sino que debemos eliminar la división en sí misma", declaró el comandante de los marines, el general David H. Berger.
La orden incluye objetos cotidianos como tazas, carteles o pegatinas de vehículos. "La bandera de batalla confederada ha sido utilizada por extremistas violentos y grupos racistas cuyas creencias causan división y no tienen cabida en nuestro Cuerpo", afirmó Berger.
14 detenidos y al menos 10 policías heridos en Londres
Catorce personas fueron detenidas y al menos diez policías resultaron heridos el pasado sábado en la capital británica al protagonizar una confrontación al término de una jornada de protestas pacíficas, según ha confirmado este domingo la Jefatura de la Policía Metropolitana de Londres.
Algunos de los protestantes llevaban máscaras para protegerse contra la COVID-19 con el eslogan 'El racismo es un virus'. Además, en la manifestación participó la cantante Madonna, que fue vista andando con muletas en una marcha por el centro de la ciudad.

En Londres, Glasgow, Birmingham o Manchester, los manifestantes, muchos con guantes y mascarillas, desafiaron los llamamientos del Gobierno y la Policía, que alertaron de que son "ilegales" las congregaciones de más de seis personas por las restricciones impuestas para frenar el coronavirus.
"Me entristece profundamente que una minoría de manifestantes hayan fomentado un ambiente de violencia en el centro de Londres", lamentó la jefa de la Policía londinense, Cressida Dick, en declaraciones recogidas por The Guardian. La Policía de Londres se mantiene en situación de alerta ante nuevas manifestaciones previstas para este domingo.